martes, 14 de diciembre de 2010

FÉLIX RODRÍGUEZ DE LA FUENTE: UN SER HUMANO EXCEPCIONAL Y NATURALISTA DE TALLA MUNDIAL

José Manuel Serrano Esparza.
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Este año 2010 que está a punto de finalizar se ha cumplido el Trigésimo Aniversario de la muerte el 14 de Marzo de 1980 de un gran hombre, Félix Rodríguez de la Fuente, cerca del Mar de Bering, en un accidente de aviación, cuando el aparato Cessna 185 en el que volaba con Teodoro Roa García, Alberto Mariano Huéscar (ambos operadores de cámara, foquistas, directores de fotografía y encargados de la selección de objetivos y emulsiones así como de la iluminación, habiendo comenzado a trabajar Alberto como ayudante de Teodoro en 1974) y el piloto americano Warren Dodson, se estrelló contra el suelo nevado veinte kilómetros al sur del pueblo esquimal de Shaktoolik (noroeste de Alaska), mientras filmaban uno de los tramos de la carrera de trineos tirados por perros Iditarod Trail Sled Dog Race, la más famosa competición de este tipo en el mundo, y que cubre 1970 km entre las ciudades de Anchorage y Nome.

Durante 20 años de impresionante actividad entre 1960 y 1980 (que se iniciaron con sus famosos programas radiofónicos que causaron furor durante la primera mitad de los sesenta - junto con sus colaboraciones televisivas iniciales en el programa Fin de Semana, con un espacio dedicado a la Naturaleza que era emitido en directo desde los estudios de TVE en el Paseo de La Habana-), Félix Rodríguez de la Fuente se convirtió en el vínculo de unión entre los pueblos de la geografía española y las grandes ciudades en pleno maelstrom del éxodo rural de millones de personas que buscaban mejores condiciones de vida como nuevos urbanitas.

Fueron quince años consecutivos realizando producciones audiovisuales para TVE, cimentando además su talla como gran comunicador, hasta su prematura muerte en Alaska en 1980, a los 52 años de edad.

Félix Rodríguez de la Fuente, considerado ya en pleno siglo XXI, 30 años después de su fallecimiento, el más importante naturalista y zoólogo realizador de películas documentales sobre animales y vida salvaje de todos los tiempos a nivel mundial junto con Jacques Cousteau (amigo personal suyo, al igual que Conrad Lorenz) y David Attenborough, creó la asombrosa cifra de 500 producciones documentales para diez series de TVE, algunas de ellas legendarias e internacionalmente aclamadas como Planeta Azul (1970-1973), Safari en Africa Oriental (1972)Fauna Salvaje, Fauna Ibérica, El Hombre y la Tierra (1974-1980), etc, que ganaron gran cantidad de elogios y premios internacionales, anticipándose en décadas a la actual preocupación mundial por la preservación ecológica en los cinco continentes.

EL HOMBRE Y LA TIERRA, UNA SERIE TELEVISIVA PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD

La inolvidable imagen perteneciente a la serie de TVE El Hombre y la Tierra de un lobo ibérico corriendo durante el crepúsculo, realzada por la famosa banda sonora original creada por Antón García Abril, se convirtió en la marca distintiva de la producción audiovisual más emblemática jamás creada por Félix Rodríguez de la Fuente, que literalmente pegó a las pantallas de sus televisores a muchos millones de personas no sólo en España sino también por todo el mundo, con un total de 124 capítulos rodados en España (92 capítulos), Venezuela (18 capítulos) y Canadá (14 capítulos).

Increíblemente, 30 años después de la muerte del legendario naturalista español, gran precursor y abanderado del Movimiento Ecologista, esta asombrosa producción rodada nada menos que en formato analógico 35 mm con las mejores cámaras cinematográficas Mitchell y Arriflex disponibles durante la década de los setenta, acopladas a lo más selecto de ópticas fijas Carl Zeiss y zooms Angenieux del momento, continúa figurando en 2010 en las más altas posiciones de las listas de ventas, una vez remasterizada digitalmente en DVD, tanto en imagen como en sonido por Divisa Ediciones.

Además, Félix Rodríguez de la Fuente, una tremenda fuerza motriz en sí mismo con respecto a todo lo que hacía, desplegando siempre un increíble grado de potencia, energía y versatilidad que le permitían enfrentarse a las más variadas tareas al máximo nivel, fue el fundador de la delegación española de la World Wildlife Fund, y llevó a cabo campañas contra la polución, contra la desecación del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, contra la extinción del caballo asturcón, etc, siendo también un contumaz activista contra la matanza de ballenas por intereses comerciales.

Asimismo, el inolvidable Félix Rodríguez de la Fuente, faro iluminador e icono humano para miles y miles de biólogos, naturalistas, zoólogos, antropólogos, etc, tanto antes como después de su muerte, no solo en España sino por todo el mundo, fue decisivo en la consecución de la protección y supervivencia de cinco maravillosas especies amenazadas de extinción: el Halcón Peregrino, el Aguila Real, el Aguila Imperial, el Lobo Ibérico y el Lince Ibérico.

CALIDAD DE IMAGEN Y PARÁMETROS DE RODAJE COMPARABLES A LAS MEJORES PRODUCCIONES DE LA INDUSTRIA CINEMATOGRÁFICA DE HOLLYWOOD
Por otra parte, tal y como señaló Keenan Smart (Director de la Unidad de Naturaleza de National Geographic), Félix Rodríguez de la Fuente fue el primer naturalista en el mundo pionero del uso de cámaras cinematográficas de 35 mm (hasta entonces los mayores niveles cualitativos de imagen en este sector eran obtenidos mediante cámaras Bolex de 16 mm con ópticas Kern Switar y Angenieux) para la filmación de documentales sobre animales en su medio ambiente real, logrando narrar historias sobre su comportamiento que nadie antes había conseguido y obteniendo una nitidez, ausencia de grano y contraste que marcaron un antes y un después en éste ámbito, superando claramente incluso a The Living Desert (1953) -famoso documental de 69 minutos sobre naturaleza y fauna de Walt Disney Productions, dirigido por James Algar y rodado con película Kodachrome 16 mm de ISO 12 y sistema Technicolor en zonas desérticas de Estados Unidos, a pleno sol, cuya enorme definición permitía blow-ups aceptables a 35 mm y subsiguiente proyección en salas cinematográficas-, y The Vanishing Prairie (1954) - otro destacado documental de Walt Disney de 71 minutos de duración y rodado en 35 mm también con sistema Technicolor- que habían sido la referencia en calidad de imagen en películas de fauna y naturaleza hasta la llegada de El Hombre y La Tierra, cuyos capítulos fueron filmados al 100% con cámaras de cine profesionales de 35 mm, entre 1974 y 1980.


"Las películas sobre Fauna y Naturaleza rodadas por Félix Rodríguez de la Fuente nos sorprendían y llamaban la atención, porque la calidad de imagen y sonido era fantástica. National Geographic trabajaba con cámaras de 16 mm y en ocasiones Super 16 mm. Era evidente que Félix trabajaba con técnicas cinematográficas muy avanzadas y extraordinariamente elaboradas, así como con un gran equipo de producción".
Keenan Smart, Director de la Unidad de Naturaleza de National Geographic.



Félix Rodríguez de la Fuente intentaba siempre lograr los máximos niveles de calidad de imagen posibles en aquellos momentos, al más puro estilo de las mejores producciones cinematográficas de Hollywood, utilizando pesadas cámaras Mitchell y Arriflex de 35 mm acopladas a las selectas ópticas fijas y zooms Carl Zeiss y Angenieux y las mejores emulsiones químicas en color Kodak del momento, esforzándose al máximo para transportar muy voluminosas distintas cámaras de cine formato paso universal hasta lugares concretos frecuentemente ubicados en bellísimos parajes naturales de difícil acceso, desde los que filmaba sus admirables series documentales.







Una de ellas, El Hombre y La Tierra, fue elegida por unanimidad en el año 2000 como la mejor producción de toda la historia de TVE por la Academia Española de las Ciencias y las Artes, convirtiéndose rápidamente en la referencia mundial en su género, y siendo distribuida en diferentes idiomas a muchos países en los que con frecuencia alcanzó espectaculares niveles de audiencia, tal y como ocurrió en Estados Unidos, donde llegó a ser número 1 en las listas de documentales sobre naturaleza y vida salvaje emitidos por televisión para millones de personas, habiéndole sido otorgado además con anterioridad el Gran Premio Príncipe Rainiero de Montecarlo por el capítulo titulado "Prisioneros del Bosque", el II Gran Premio de París de L´Emision Scientifique de Television Centre National de la Recherche en 1977 por el capítulo sobre el lobo ibérico titulado "El Cazador Social", el II Gran Premio de Paris de L´Emision Scientifique de televisión Centre National de la Recherche por el capítulo titulado "El Buitre Sabio" en 1978 junto con el Ondas, Antena de Oro y TP de Oro 1976 como Mejor Programa Nacional de Televisión Española.

Félix Rodríguez de la Fuente estrechando la mano de otro naturalista de talla mundial: Jacques Cousteau. Ambos establecieron una sincera amistad y mútua admiración.

Baste decir que hubo algunos directores tanto de TVE como de Editorial Salvat Ediciones que tuvieron ocasión de ver proyectadas en pantalla en la sala cinematográfica de proyección nº 2 del edificio de TVE en el Paseo de la Habana (Madrid), las bobinas de 35 mm de los capítulos de El Hombre y la Tierra rodados por el equipo de Félix Rodríguez de la Fuente en la jungla de Venezuela, y todos ellos coincidieron: aquellas imágenes mostraban un poder de resolución, un contraste, una nitidez, una profundidad de color y un impacto visual virtualmente imbatibles, todo ello potenciado por la precisión del gran foquista Teodoro Roa, por entonces uno de los pocos cámaras profesionales de TVE especializados en la filmación de animales.


Félix Rodríguez de la Fuente y Teodoro Roa.


Félix Rodríguez de la Fuente, Teodoro Roa y Alberto Mariano Huéscar.

Y estaban en lo cierto, ya que habrían de pasar 26 años hasta la aparición de la cámara Heligimbal HD (capaz de girar 360º y dotada de un zoom muy potente de altísima calidad de imagen capaz de encuadrar hasta una distancia de un km con total estabilidad) introducida por la BBC en el primer capítulo de su serie de televisión Planet Earth en 2006 para que alguien fuera capaz de ofrecer documentales sobre fauna y naturaleza en estado salvaje comparables en espectacularidad e innovación a los obtenidos por Félix Rodríguez de la Fuente en su mítica serie El Hombre y la Tierra, si bien por lo que respecta a calidad de imagen, profundidad de color y sobre todo impacto, algunas series de Félix, en especial El Hombre y La Tierra (tanto los capítulos realizados en España como en Sudamérica) rodada con película química de 35 mm y cámaras cinematográficas profesionales Mitchell BNC y Arriflex, probablemente no serán jamás batidas, debido a su enorme adecuación a cualquier tipo de formato de grabación digital que pueda aparecer en el futuro, tal y como se demostró recientemente con la nueva edición completa en DVD de Divisa Ediciones - incluyendo todos los capítulos- de la mencionada serie El Hombre y La Tierra, con imagen remasterizada digitalmente mediante scanner profesional de película de última generación a partir de las bobinas originales Kodak de 35 mm reveladas en laboratorio fotográfico durante los años setenta y los cuatro primeros meses de 1980 y que fueron sabiamente custodiadas por Marcelle Genoveve Parmentier durante casi 30 años, lo cual ha permitido mediante la moderna tecnología digital un salto cuántico en calidad de imagen y sonido (igualmente remasterizado de modo digital a partir de las excelentes tomas Hi-Fi monofónicas originales) en comparación con ediciones previas de El Hombre y la Tierra comercializadas en formato de cinta VHS, y la posibilidad de disfrutar de una experiencia audiovisual alucinante y fascinante con cualquier reproductor DVD o Blu-ray compatible.

LA RESTAURACIÓN DIGITAL Y REMASTERIZACIÓN DE IMAGEN Y SONIDO EN DVD DE EL HOMBRE Y LA TIERRA REALIZADA POR DIVISA EDICIONES: UN HITO EN LA HISTORIA DE LAS PRODUCCIONES AUDIOVISUALES SOBRE FAUNA Y NATURALEZA

La restauración y remasterización digital de imagen en DVD de la serie El Hombre y la Tierra (probablemente la serie documental sobre fauna salvaje y naturaleza con mayor éxito de la historia, vista en TV durante la segunda mitad de los años setenta por 800 millones de personas en más de 40 países distintos de los cinco continentes, cifra que ha aumentado notablemente desde la muerte del mítico Félix Rodríguez de la Fuente, gracias a multitud de reposiciones televisivas ) constituye uno de los más importantes proyectos audiovisuales dedicados a la vida salvaje y naturaleza jamás realizados en el mundo y ha sido llevado a cabo por Divisa Ediciones mediante la digitalización profesional fotograma a fotograma realizada mediante un scanner de película de última generación con el que se escaneó cada negativo original químico de 35 mm a 10 bits en lugar de los 8 que habitualmente aporta un sistema convencional.


Ello permitió trabajar con una gradación de 1024 tonalidades por cada uno de los colores primarios RGB, en vez de hacerlo con los 256 tonos que se habrían obtenido con un dispositivo de 8 bits, de tal manera que se obtuvo la máxima calidad posible para el siguientes paso: la corrección del color, que se llevó a cabo mediante un corrector digital para cine de última generación, capaz de trabajar con infinitas capas, máscaras irregulares y puntos de track para seguir los movimientos, y una vez hecha la corrección de color, las imágenes fueron sometidas a un proceso de restauración digital, eliminando la inestabilidad, las rayas, las roturas y empalmes del negativo original, etc.

Todo ello, nunca habría sido posible sin la gran previsión y criterio de Marcelle Genevieve Parmentier, viuda de Félix Rodríguez de la Fuente, que durante casi treinta años ha guardado con gran cuidado las bobinas originales de emulsión química cinematográfica Kodak de 35 mm de que contienen los 124 capítulos de El Hombre y la Tierra (Fauna Venezolana, Fauna Ibérica, Fauna Canadiense y Alaska) filmados entre 1974 y 1980.

La colección está formada por un total de 25 discos DVD, que incluyen los 92 capítulos de Fauna Ibérica, los 18 de Fauna Venezolana y 14 de Fauna Canadiense, habiéndose añadido además una biografía de Félix Rodríguez de la Fuente elaborada por su hija Odile.

Poza de la Sal (Burgos). 2010. Foto: José Manuel Serrano Esparza

Poza de la Sal (Burgos). 2010. Foto: José Manuel Serrano Esparza

Poza de la Sal (Burgos). 2010. Foto: José Manuel Serrano Esparza


Poza de la Sal (Burgos). 2010. Foto: José Manuel Serrano Esparza.


Poza de la Sal (Burgos). 2010. Foto: José Manuel Serrano Esparza

La calidad de imagen de estos discos DVD de Divisa Ediciones es impresionante ya con un reproductor DVD normal, muchísimo mejor que todo lo existente en formato analógico de cinta VHS o digital en youtube, y una auténtica delicia el poder verlos en un televisor de alta definición de 32 o más pulgadas, pero si tenemos en cuenta que a día de hoy la mayoría de reproductores Blu-ray de última generación permiten tanto el visionado de discos DVD a su resolución standard como el escalado de la señal de reproducción DVD para conseguir 720p/1080i e incluso 1080p en algunos modelos, se puede ir todavía un paso más allá y ver estas maravillosas producciones en color casi en full HD 1920 x 1080 a efectos prácticos, alcanzando un nivel de calidad de imagen que solo puede ser definido como impresionante, preservando en gran medida el poder de resolución, contraste y estética de imagen de las películas químicas cinematográficas de 35 mm utilizadas con cámaras de cine Arri y Mitchell usadas por el equipo de Félix Rodríguez de la Fuente durante los años setenta.

Poza de la Sal (Burgos). 2010. Foto: José Manuel Serrano Esparza

SONIDO ORIGINAL HI-FI MONOFÓNICO DE EXTRAORDINARIA CALIDAD, OBTENIDO CON GRABADORES PROFESIONALES ANALÓGICOS A CARRETE ABIERTO NAGRA III NP Y NAGRA 4.2 ENTRE 1974 Y 1980, RESTAURADO Y REMASTERIZADO DIGITALMENTE TREINTA AÑOS DESPUÉS
Desde principios de los años sesenta, Félix Rodríguez de la Fuente se convirtió en un apasionado de la escucha de sonidos producidos por diferentes especies de animales grabados mediante los magnetófonos analógicos de cinta disponibles en aquella época en España, cuya variedad y calidad no alcanzaba en general el nivel de fidelidad deseado por Félix, hombre dotado de gran oído, acostumbrado a escuchar a los animales en su hábitat natural y que deseaba a toda costa poder reproducir con la mayor precisión posible la extensa gama de sonidos emitidos sobre todo por aves de presa y mamíferos en sus circunstancias vitales más diversas, para su posterior estudio.

Félix era plenamente consciente de que ello presentaba notables dificultades, ya que a diferencia de un estudio de grabación donde todo está bajo control, en plena naturaleza hay abundantes factores como los distintos ruidos, las distancias a los micrófonos, el viento, y el perfil huidizo de los animales, que influyen notablemente en los resultados finales, además de que en las localizaciones faunísticas y de paisajes en exteriores se precisan enormes niveles de paciencia y conocimientos naturalistas para poder discernir lo que vamos a escuchar y cuándo y dónde han de realizarse las tomas sonoras con los micrófonos, que son en gran medida la clave.

Tras muchas salidas al campo con distintos magnetófonos de bobina y realizar abundantes grabaciones sin obtener los resultados que quería, Félix Rodríguez de la Fuente, con su atávica tenacidad y gran capacidad autodidacta, comenzó a estudiar en profundidad los sistemas profesionales de grabación de sonido existentes por aquellas fechas.

Hasta entonces, las cámaras de estudio estaban insonorizadas y solucionaban el problema inicial del sonido directo, pero no podían ser utilizadas en exteriores.

Félix tenía ya in mente la creación de series documentales sobre fauna y naturaleza filmadas en parajes naturales que habrían de hacerle mundialmente famoso durante la década de los setenta y con los que se convertiría en el referente internacional en este ámbito, pero antes tenía que encontrar la manera de resolver la dificultad que entrañaba la captación de sonido directo en el cine documental que deseaba hacer: necesitaba cámaras que no hicieran ruido (también había estudiado concienzudamente los diferentes sistemas de sonido sincronizado y blimps de reducción de ruido para cámaras Bólex de 16 mm) y que pudieran ser utilizadas en todo tipo de biotopos, pero además, le era absolutamente necesario tener un equipo profesional de alta fidelidad que obtuviera la mayor calidad de sonido posible y que a la vez estuviera conectado a la cámara de tal manera que le permitiera sincronizar imagen y sonido.


Finalmente, a finales de los sesenta se decantó por el magnetófono portátil profesional grabador a carrete abierto Nagra III NP (1962), Hi-Fi monofónico y con sincronización Neopilot con polarización de alta frecuencia (que posibilita el funcionamiento simultáneo al 100% y a la misma velocidad tanto del magnetófono como de la cámara de cine sin necesidad de cable de conexión), que llevaba siendo desde 1963 la cúspide cualitativa utilizada por la industria cinematográfica de Hollywood con respecto a sonido profesional en filmaciones realizadas en localizaciones en exteriores.

El Nagra III, cuyo modelo inicial había aparecido en 1957, fue una de las obras maestras del famoso ingeniero de sonido polaco residente en Suiza Stefan Kudelski, que mediante un sabio uso de transistores con germanio y un motor servocontrolado DC así como un durísimo chasis de aluminio y sobre todo un modulómetro que medía los niveles de picos decibélicos, consiguió crear este legendario y muy compacto magnetófono grabador profesional fácilmente transportable (podía utilizar 12 pilas cilíndricas de tipo D como suministro de energía , que utilizaba cinta flexible de acetato de celulosa de 6.35 mm y que era muy fiable y virtualmente indestructible, incluso bajo las condiciones climáticas más extremas, generando una calidad de sonido extraordinaria que sólo era ligeramente superada en aquellos momentos por el magnetófono grabador de estudio a carrete abierto Ampex de tres pistas (con amplificador de válvulas Model 300-3), de notable tamaño y peso, que usaba cintas de media pulgada y fue utilizado en la segunda mitad de los años cincuenta por el gran ingeniero de sonido Lewis Layton para realizar las célebres grabaciones RCA Living Stereo Sound durante los conciertos de Fritz Reiner dirigiendo a la Orquesta Sinfónica de Chicago, así como de otros destacados músicos de talla mundial como Jascha Heifetz, Igor Piatigorsky, Artur Rubinstein, etc.

El sistema de sincronización Neopilot tenía tal calidad y precisión que aguantó casi 20 años en el mercado siendo la referencia en el entorno cinematográfico hasta finales de los años ochenta, cuando fue sustituido por el standard timecode, mientras que la cinta analógica profesional de 6.35 mm fue progresivamente sustituida por el sistema DAT desde mediados de los años noventa.

Para hacerse una idea de la calidad sonora obtenida por Félix Rodríguez de la Fuente con magnetófono profesional analógico Nagra III (que alcanzaría su cénit con las cintas de bobina abierta grabadas por el técnico de sonido Manuel Peña en los capítulos de El Hombre y La Tierra dedicados a la guerra acústica entre rapaces nocturnas y roedores, como veremos más tarde), cabe resaltar que aunque los modernos equipos de grabación digital son técnicamente más precisos, el nivel cualitativo y realismo puro y duro obtenido con los equipos analógicos a bobina abierta fabricados por Stefan Kudelski son simplemente soberbios y constituyeron en el momento de la aparición del modelo Nagra III en 1957 una revolución en el concepto de grabación profesional del más alto nivel con equipos portátiles, por lo que se convirtieron en el standard sonoro de la industria de Hollywood durante los años sesenta, setenta y ochenta, tres décadas durante las cuales su calidad de sonido fue únicamente batida por las citadas grabaciones en Alta Fidelidad RCA Living Stereo Sound (realizadas en primer lugar con grabador de estudio Ampex 300-3 dotado con amplificadores a válvulas -que usaba cintas de media pulgada- con micrófono condensador cardioide Neumann U-47 y omnidireccional M-49/50) y sobre todo desde 1961 por las Living Presence Stereo Sound Recordings de Mercury con grabador de estudio Westrex - también dotado de amplificadores a válvulas - sobre película magnética de audio de nada menos que 35 mm y tres pistas y micrófonos omnidireccionales Telefunken U-47 y RCA 44BX, BK 5 y KM 56. Tanto las grabaciones de tres pistas RCA Living Stereo Sound en cinta de 1 / 2 pulgada (12.7 mm) como las Presence Stereo Sound Recording en celuloide de 35 mm de gran superficie, eran posteriormente volcadas a cintas de 1/4 de pulgada (6.35 mm) y dos pistas en calidad de masters para su lanzamiento al mercado.



Igualmente, entre 1974 y 1980, durante la filmación de abundantes capítulos de El Hombre y la Tierra, se utilizó también el grabador profesional monofónico Hi-Fi a carrete abierto Nagra 4.2 (manejado por el ya mencionado Manuel Peña y Antonio Torreblanca, otro gran técnico de sonido colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente).


El Nagra 4.2 había aparecido en 1971. Dotado con transistores de silicio y una circuitería antidistorsión con componentes audiófilos optimizados, incluía nuevas prestaciones e incluso mejoraba la calidad de sonido grabado ya de por sí extraordinaria de los modelos previos Nagra III (1957), Nagra III NP (1962) y Nagra -L (1968), además de añadir micrófonos más potentes, superiores preamplificadores y ecualizadores incorporados.

Puede realizar grabaciones tanto mediante micrófonos como a través de una señal de entrada en línea. 


Posee tres velocidades de funcionamiento: 38 cm/seg, 19 cm/seg (la que aporta mayor calidad de sonido, al igual que en el Nagra III) y 9.5 cm/seg, NAB o CCIR standard, así como dos cabezales independientes para grabación y playback, modulómetro y dos entradas (con diferentes modelos de preamplificadores de micrófonos disponibles con potencia Dinámica, T o Phantom, en función del tipo de micrófono que se ajuste) para micrófonos, además de una ulterior en línea por medio de cable QCE.

Además, puede funcionar perfectamente a temperaturas entre -20º C y 72º C (con pilas cilíndricas D) y entre -55º C y 71º C con fuente de alimentación externa.


Al igual que el Nagra III NP, el Nagra 4.2 (en su versión NQS-L con sistema Neopilot -con accesorio opcional QGX-3 Quartz Crystal Pilot Generator para filmación sincronizada sin cable y frecuencia de señal seleccionable entre 50 y 60 Hz +- 0.001% y es muy estable a los cambios extremos de temperatura- que fue la utilizada por Manuel Peña y Antonio Torreblanca, técnicos de sonido de El Hombre y la Tierra-) está construído como un tanque, pero con la calidad y precisión de un reloj suizo, e incorpora el sistema de sincronización con cámara cinematográfica Neopilot 50/60 Hz con generador de cuarzo, además de poder funcionar tanto con la fuente de alimentación externa ATN-3 como con 12 pilas cilíndricas D en su interior.


Micrófono profesional direccional Sennheiser MKH 816T de condensador, modelo usado por Manuel Peña y Antonio Torreblanca para la grabación de sonido directo en exteriores, conectado mediante cable XLR de tres pins al Nagra 4.2 NP. Aparecido en 1975 y con un peso de 350 g, 55.6 cm de largo y 1.9 cm de diámetro, fue uno de los primeros micrófonos superdireccionales introducidos en el mercado, con un diseño de cápsula de baja impedancia que le hace virtualmente inmune a la alta humedad y a la condensación y el típico preamplificador especial para condensadores de micrófono, incorporado en su envoltorio, que permite la transmisión de la señal a través de cable.

Este tipo de micrófonos utiliza resonadores únicamente en las altas frecuencias extremas (donde el fenómeno de la coloración no es importante), por lo que son con diferencia los mejores en cuanto a su fidelidad y realismo en la captación del sonido, ciertamente extraordinaria, con la ventaja añadida de una excelente reproducción de los transientes.

Fue utilizado a velocidad de 38 cm/seg para conseguir las máximas calidades posibles de registros sonoros en exteriores.

Un Windshield Rycote para micrófono profesional direccional Sennheiser MKH 816T similar a éste y conectado a grabador profesional de cinta a carrete abierto Nagra 4.2 fue utilizado por los técnicos de sonido Manuel Peña y Antonio Torreblanca en distintos capítulos de El Hombre y la Tierra

 Este accesorio, que envuelve completamente tanto al micrófono como a su conector y genera una masa de aire estático en torno al micrófono, aporta una gran protección frente al ruido provocado por fuerte viento, permitiendo su reducción en hasta 25 decibelios, lo cual fue especialmente útil durante el rodaje de los capítulos de El Hombre y la Tierra realizados en Canadá (Parques Nacionales Nahanni y Kluane) y Alaska, cuyas tomas sonoras fueron realizadas por Manuel Peña.


Debido a que el factor humano era y sigue siendo la clave de la calidad de las grabaciones sonoras, una excelente toma de sonido monofónica realizada durante los años cincuenta, sesenta y setenta por un técnico de sonido o ingeniero competente, puede sonar mejor que un CD, un SACD o un DVD-Audio grabados a finales de los noventa o durante la primera década del siglo XXI con medios muchísimo más sofisticados y caros.

Y ésto es exactamente lo que ocurrió con las grabaciones llevadas a cabo con Nagra III NP y Nagra 4.2 por Manuel Peña (gran técnico de sonido colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente) que realizó las grabaciones sonoras de todos los programas de El Hombre y La Tierra (rodados en Venezuela, España, Canadá y Alaska) entre 1974 y 1980, sin olvidar tampoco la valiosa ayuda de Antonio Torreblanca y Manuel Barroso, que colaboraron también con Félix en la faceta sonora en algunos de sus programas.

Es importante también tener en cuenta que tanto el Nagra III NP como el Nagra 4.2 son grabadores profesionales full track, en los que la cinta de 6.35 mm es grabada sobre la totalidad de su superficie de acetato de celulosa, en una sola dirección, por lo que la calidad y fidelidad en el sonido obtenido son excelentes.

Tal y como sucede con la impresionante calidad de imagen remasterizada digitalmente fotograma a fotograma a partir de los negativos originales de las películas químicas cinematográficas de 35 mm para realizar los discos DVD de El Hombre y La Tierra de Divisa Ediciones (tanto la edición "normal" como la muy reciente lanzada al mercado en estuche de lujo para coleccionistas), muy superior a todo lo anteriormente existente tanto en VHS como en youtube, las cintas analógicas originales de 1/4 de pulgada (6.35 mm) grabadas en alta fidelidad con magnetófonos profesionales Nagra monofónicos a carrete abierto y también sabiamente custodiadas durante casi treinta años por Marcelle Geneveve Parmentier, han permitido a Divisa Ediciones remasterizar digitalmente dicho sonido original, restaurando la música, los efectos y la locución, y volviéndose a mezclar para ofrecer la máxima calidad de sonido, reduciendo además a cero el ruido residual inherente a todos los grabadores de cinta (aunque en el caso tanto del Nagra III como del Nagra 4.2 era ya de por sí insignificante, al ser los modelos cumbre portátiles de su época junto con los Stellavox) y hacer posible dos opciones de escucha en audio digital de muy alta calidad: a) Sonido Hi-Fi monofónico digital de alta definición; b) Sonido envolvente multicanal Dolby Digital 5.1 creado a partir del original monofónico en alta fidelidad digitalizado y restaurado.


Micrófono profesional direccional de condensador Sennheiser MKH 816T con su windshield Rycote y funda de lana. Optimizado para localizaciones exteriores, la calidad de sonido obtenida por este legendario micrófono era tal, que fue utilizado durante los años ochenta por la Sociedad Audubon para la grabación de registros sonoros producidos por diferentes especies de aves, e incluso John Feith, el ingeniero que diseñó el filtro reductor de ruido para Sony, es un entusiasta usuario suyo.

Esta combinación fue la referencia mundial outdoors durante la segunda mitad de los años setenta y buena parte de los ochenta (hasta que modelos posteriores como el Sennheiser MKH 70 con menor peso, mayor precisión e incluso niveles más reducidos de distorsión, le fueron sustituyendo progresivamente), lo cual da idea del impresionante nivel de calidad sonora que buscó en todo momento y en los más diversos lugares y climas el equipo de El Hombre y la Tierra dirigido por el Dr. Félix Rodríguez de la Fuente.


Antonio Torreblanca utilizó con gran pericia el Nagra 4.2 conectado a micrófono profesional direccional Sennheiser MKH 816T cubierto por windshield Rycote para registrar todo tipo de ambientes naturales en diferentes capítulos de la serie El Hombre y la Tierra, en especial los dedicados al Lobo Ibérico rodados en el valle del río Dulce, cerca del pueblo alcarreño de Pelegrina, donde también participó Manuel Peña en la faceta de registro sonoro.

Cabe destacar que David Attenborough también utilizó el Nagra 4.2 para la grabación de sonido en su serie sobre fauna salvaje para la BBC Life on Earth (1979), añadiendo a principios de los ochenta la actualización que permitía la grabación de código de tiempo SMPTE, aunque poco después se decantó por el Nagra IV-S stereo con el que además de la sincronización pilottone crystal incorporada, fue posible desde 1984 la grabación con código de tiempo.

Por tanto, queda claro que al igual que ocurría en el ámbito de la calidad de imagen con sus grandes cámaras cinematográficas de 35 mm Arri y Mitchell, Félix Rodríguez de la Fuente consiguió también la mejor calidad de sonido existente en el mundo con equipos portátiles hasta su muerte en 1980, utilizando los mejores magnetófonos grabadores Nagra disponibles y valiéndose de la ayuda de expertos técnicos de sonido como Manuel Peña y Antonio Torreblanca, obteniendo un sonido muy natural y dinámico, de gran nitidez, neutralidad tonal y notable precisión en la extracción de las más delicadas microinformaciones y detalles en todo tipo de entornos naturales y de animales salvajes.


La construcción interna del Nagra III NP revela un especial cuidado en todo lo relacionado con la mecánica de alta precisión y su decisiva influencia en el sonido, sin olvidar la impecable realización de los puntos de soldadura (aspecto clave a la hora de maximizar las prestaciones sonoras).


En esta otra imagen del interior del Nagra III NP Hi-Fi monofónico puede apreciarse la circuitería realizada con componentes de grado audiófilo de muy alta calidad.

La topología circuital analógica tanto del Nagra III NP como del Nagra 4.2, construída sin compromisos, con componentes electrónicos exquisitamente seleccionados, se deja sentir en la audición de estos discos DVD de El Hombre y La Tierra, cuyo realismo sonoro hace que sintamos la emoción del directo percibida por Félix y sus colaboradores durante las grabaciones en vivo hace más de tres décadas. 

Es un sonido de nitidez cristalina que reproduce de modo muy veraz el ambiente acústico en plena naturaleza de cada una de los lugares donde fue realizada cada grabación de los distintos capítulos, con un grado mínimo de fatiga auditiva al cabo de horas disfrutando estos tesoros audiovisuales en formato DVD.

Imagen del Nagra 4.2 Hi-Fi monofónico mostrando el interior de su zona superior e inferior. Al igual que en el Nagra III NP, destaca la gran belleza de diseño, la profusa presencia de aluminio y una precisión de mecanizados propia de manufacturas relojeras suizas, realizada con metales nobles de larga duración capaces de soportar durante décadas un duro uso profesional en exteriores.

Detalle del interior de la zona inferior del Nagra 4.2 en la que destacan una muy refinada electrónica de transistores obra del genio Stefan Kudelski, unos componentes audiófilos de gran calidad, seleccionados por sus virtudes sonoras después de horas y horas de escucha, y una enormemente sofisticada circuitería para la época, que combina una personalidad sonora de la más alta fidelidad con muy avanzadas técnicas de montaje. Una construcción irreprochable, que garantiza el mantenimiento de las prestaciones a lo largo de muchos años.

A destacar el hecho de que aunque lógicamente hoy en día, ya en pleno siglo XXI, la tecnología ha evolucionado mucho y un elevado porcentaje de los equipos de grabación de sonido profesionales son digitales, con mucho menor peso, mayor sensibilidad, superior versatilidad y posibilidades, todavía hay ingenieros y técnicos de sonido así como expertos en efectos sonoros, que prefieren utilizar magnetófonos analógicos profesionales Nagra de bobina abierta para la grabación de sonidos con enorme alta fidelidad, amplia gama dinámica y especial personalidad sonora, lo cual da idea del enorme realismo de registro sonoro, veraz reproducción del ambiente acústico donde fue realizada la grabación y sensación de directo que obtienen, además de ser superiores a la hora de hacer frente a inesperadas sobrecargas de señal.



Es asimismo una imagen sonora que ostenta un realismo inefable en los diversos planos sonoros, preservando una estabilidad impecable con independencia del volumen al que se lleve a cabo la escucha, algo que puede disfrutarse también plenamente con equipos de Cine en Casa, gracias a la excelente digitalización llevada a cabo por Divisa Ediciones a partir de las extraordinarias tomas de sonido originales monofónicas Hi-Fi realizadas por Manolo Peña y Antonio Torreblanca con grabadores portátiles high end Nagra III y Nagra 4.2 en cintas analógicas de 6.35 mm.

Habrían de pasar casi veinte años tras la muerte de Félix hasta que Chris Watson, probablemente el más importante experto de la historia en grabación de sonido de documentales sobre vida salvaje y naturaleza, pudiera mejorar la calidad de sonido obtenida por Félix en El Hombre y La Tierra (1974-1980) en las series The Life of Birds (1998) y The Life of Mammals (2002) de David Attenborough para la BBC, utilizando respectivamente el grabador reproductor de estado sólido Nagra ARES-C de 16 bit con conversor Sigma-Delta AD/DA y frecuencias de muestreo seleccionables de 16, 24, 32 y 48 kHz con generador de código de tiempos interno y el Nagra DII con convertidores integrados AD/DA de 24 bits, frecuencia de muestreo de hasta 96 kHz stereo y obtención de la mayor gama dinámica conocida en un grabador portátil de sonido profesional, que permite grabar una mayor variedad de sonidos y utilizar un porcentaje de sonido de producción significativamente más alto, ahorrando costes de post producción, contando igualmente con código de tiempos interno.


Por increíble que pueda parecer, Félix Rodríguez de la Fuente tenía claro hace más de treinta años que el futuro mercado del audio se definiría mayormente en clave audiovisual y buscó también la excelencia a todos los niveles tanto en la grabación como en la restitución del sonido.

De este modo, tanto los usuarios de televisores de plasma, LCD y LED de grandes dimensiones como los poseedores de equipos Home Cinema HD y Full HD disfrutarán no sólo de una enorme calidad de imagen con las excelentes cualidades estéticas (saturación de colores, excepcional nitidez, etc), inherentes a las películas químicas cinematográficas de 35 mm en color, sino también de una calidad de sonido impresionante, tanto cuando los protagonistas son los diferentes animales como cuando Félix toma la palabra, una experiencia totalmente nueva disponible a día de hoy para las personas que vieron la serie El Hombre y la Tierra durante los años setenta, ochenta y noventa tanto en televisión como en VHS con una calidad audiovisual muy inferior, que estaba a años luz de la auténtica calidad profesional de imagen y sonido disponible ahora con estos maravillosos discos DVDs de El Hombre y La Tierra de Divisa Ediciones.

ENORME IMPACTO MEDIÁTICO TANTO EN ESPAÑA COMO EN OTROS PAÍSES DE LOS CINCO CONTINENTES Y PERVIVENCIA DE SU MENSAJE

Félix Rodríguez de la Fuente causó un tremendo impacto en la sociedad española gracias a sus muy abundantes apariciones en diversos programas televisivos a finales de los años sesenta y durante la década de los setenta(etapas que habían estado precedidas por no menos influyentes programas radiofónicos sobre animales y naturaleza), donde desplegaba sus colosales conocimientos sobre diferentes especies zoológicas tanto de la Fauna Ibérica como de los cinco continentes y mostraba a los telespectadores la enorme pasión y pertinacia con la que defendía sus ideas conservacionistas y ecológicas, sus ímprobos esfuerzos hasta la última gota de energía por salvar animales en peligro de extinción, su total convicción y maestría con respecto a los temas que trataba, su inagotable capacidad de trabajo, su persistencia constante siendo el hombre que asumía siempre los mayores riesgos con las especies peligrosas (por ejemplo, durente el rodaje del rescate de anacondas en Venezuela en uno de los capítulos de El Hombre y la Tierra, siempre es él quien agarra de la cabeza y cuello a los ejemplares más grandes de Eunectes murinus, una acción muy peligrosa que sería mostrada con todo su dramatismo en la famosa escena en la que una de las potentes anacondas del Orinoco está a punto de matarle tras soltarse súbitamente del agarre e intentar morder la cabeza de Félix, aunque en el último momento éste consigue impulsarse hacia atrás), su preocupación medioambiental, la lucha durante toda su vida para conseguir la creación de espacios naturales protegidos y parques nacionales concebidos para la vida animal, su increíble hechizo y precisión al hablar sin necesitar nunca guión alguno u hoja de papel de referencia (improvisando todo sobre la marcha y aportando una pléyade de datos y situaciones vividas a cual más interesante), encontrando siempre la palabra adecuada sin incurrir en reiteración, poniendo el alma en todo lo que decía sobre sus amados animales (Félix Rodríguez de la Fuente fue siempre popularmente conocido por millones y millones de personas como "El Amigo de los Animales"), el modo en que era identificado por los lobos como el jefe de la manada, su amor por los niños y tantas y tantas cosas más.

Su mensaje dió sus frutos, y treinta años después de su muerte la gente no le ha olvidado y cada vez más jóvenes y adultos que no habían nacido cuando Félix falleció, se interesan de modo incesante por la figura colosal de este hombre grandioso cuya talla aumenta cada vez más con el paso del tiempo, un personaje histórico y único donde los haya habido, inimitable, genuino, auténtico, que transmitía al instante la veracidad de lo que decía y cuyo recuerdo sigue muy vivo.

Es una llama que nunca se extinguirá y cuya esencia ha sido magistralmente captada por Benigno Varillas en su gran libro Félix Rodríguez de la Fuente: Su Vida, Mensaje de Futuro, una obra de 761 páginas presentada muy recientemente, el 12 de Marzo de 2010, por el autor, Marcelle Genevieve Parmentier y Odile Rodríguez de la Fuente en el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, que demuestra que 30 años después de su fallecimiento el gran naturalista español está más vivo que nunca y que constituye en mi opinión una imprescindible referencia para todos aquellos que quieran profundizar en el conocimiento de la vida y obra de Félix Rodríguez de la Fuente, así como muchísimos aspectos de su personalidad y detalles de su biografía desconocidos hasta ahora, junto con facetas que demuestran claramente su gran alcance histórico como visionario que desde principios de los años sesenta se anticipó en casi cuatro décadas al tratamiento de temas ecológicos y medioambientales que serían objeto de gran reflexión social y científica ya en pleno siglo XXI, sin olvidar que se ha descubierto que Félix predijo la génesis de internet con más de treinta años de antelación.


El primer ejemplar del citado libro le fue entregado en Poza de la Sal (Burgos) por Benigno Varillas a Policarpo de la Fuente, gran amigo de la infancia de Félix que vivía muy cerca de su casa.

" Yo recuerdo cuando era niño, que cuando me iba a los páramos de mi pueblo, en Poza de la Sal, y volvía, vencida ya la tarde, con las primeras estrellas, a mi casa, el pueblo olía de una manera especial. Era el fuego de las chimeneas, que olían entonces a carbón vegetal, a bojes, a ahuladas, a leña. El olor del pueblo, mezclado quizá con el olor de pan cocido y con el olor un poco ácido y cálido del ganado doméstico. Llevo clavado en lo más profundo de mi ser el olor que tenía mi pueblo cuando yo volvía por las tardes ".
Félix Rodríguez de la Fuente

Poza de la Sal (Burgos). 2010. Foto: José Manuel Serrano Esparza

REFERENTE MUNDIAL EN EL CONOCIMIENTO DE NUMEROSAS AVES DE PRESA
El Dr. Félix Rodríguez de la Fuente sujetando su famoso halcón peregrino "Durandal" (Falco Peregrinus). El gran naturalista fue uno de los científicos que firmó en 1954 el acta fundacional de la Sociedad Española de Ornitología. Desde esta plataforma y gracias a los estudios de campo que él personalmente llevó a cabo, fue posible proteger en España en 1966 tanto al Halcón Peregrino como a las aves rapaces nocturnas, algo para lo cual fue muy importante el Congreso Internacional para la Protección de Aves de Presa celebrado en Caen (Francia) en 1963, donde Félix dió a conocer su extraordinaria investigación sobre las poblaciones de Halcón Peregrino en España, un evento muy potenciado por el Dr. Félix Rodríguez de la Fuente merced a sus muy amplios contactos internacionales por todo el mundo con cetreros y biólogos (por ejemplo, Michel Terrasse, Vicepresidente de Birdlife France era gran amigo suyo) que luchaban por conseguir un cambio de mentalidad con respecto a las aves de presa, que eran tristemente conceptuadas hasta aquellos momentos como animales nocivos, por lo que a menudo se las mataba mediante venenos, disparos con escopetas de caza (incluso se pagaba dinero por ello) y pesticidas.

Trabajando siempre hasta la extenuación, Félix logró sus objetivos en este ámbito, convirtiendo a España en el país buque insignia en cuanto al estudio de las aves de presa, mediante una amplia gama de leyes conservacionistas.

Félix Rodríguez de la Fuente se sintió siempre embelesado por la excepcional belleza y rasgos del Halcón Peregrino (Falco peregrinus), y su idilio con este ave de presa tan sumamente bella comenzó durante los años treinta, siendo niño en Poza de Sal (Burgos), su pueblo natal, cuando un día, hallándose junto a una gran laguna ubicada a las afueras, escuchó de repente un silbido y vió a un halcón peregrino cayendo en pronunciado picado a enorme velocidad desde gran altura (puede alcanzar hasta 400 km/h en su vertiginoso descenso) contra un pato en pleno vuelo, matándolo en el acto con el impacto de sus garras y acabando el ave palmípeda todavía palpitante en el suelo junto a él.

Esta experiencia ejerció una enorme influencia en la vida de Félix y su futuro profundo interés y estudio por las diferentes aves de presa, estando siempre fascinado por el arte de la cetrería que permitía a un hombre cazar en sinergia con un ave rapaz totalmente libre, que tras el vuelo, volvía a su mano.

El contacto con esta asombrosa ave de presa (tal es su belleza y elegancia que su variedad Falco peregrinus brookei inspiró al director de cine John Huston para la creación de la estatua que aparece en la película de 1941 El Halcón Maltés, con Humphrey Bogart, Mary Astor y Gladys George como principales intérpretes) fue decisivo durante la juventud de Félix Rodríguez de la Fuente para cimentar su interés por el mundo de la etiología animal, que él ampliaría posteriormente a otras especies tanto de aves como de mamíferos.

Y Félix, cuya preocupación y conciencia ecológica por la necesidad de transmitir a la sociedad este mensaje conservacionista sobre las aves de presa era notable, empezó a escribir muchos artículos sobre el tema en distintas revistas e hizo su primera película documental: "Alas y Garras: El Maravilloso Mundo de los Pájaros", que ganó algunos premios como el Arquero de Oro del Festival de Gijón.

Además, obtuvo un premio internacional de cetrería e inició una vida dedicada a la comunicación, tanto en radio como en televisión, cuyo punto de inflexión fue una aparición de increíble éxito en el programa de Televisión Española Fin de Semana, en el que habló sobre su muy querido Halcón Peregrino "Durandal", hechizando a millones de personas por todo el país, de los cuales cientos de miles enviaron cartas a los estudios de TVE en Prado del Rey y Paseo de La Habana pidiendo con vehemencia que "echaran más programas de ese hombre", generando una situación límite sin precedentes que forzó varias reuniones de los máximos responsables de TVE, que ante la avalancha de misivas y la enorme presión popular, decidieron otorgar a Félix más minutos en sus programas, así como una mayor frecuencia de emisión de los mismos.

El Dr. Félix Rodríguez de la Fuente con un águila real (Aquila chrysaetos) posada sobre su mano derecha. Esta ave rapaz superdepredadora, dotada de enorme potencia, posee una impresionante capacidad visual equivalente a unos prismáticos 10x de alta calidad, lo cual le permite localizar presas situadas a distancias de hasta 1 kilómetro, y fue la protagonista de muchos documentales de Félix Rodríguez de la Fuente, dejando sin habla a los televidentes con asombrosas escenas de caza como la mítica en la que una enorme águila real se lanza en picado sobre un recental de cabra montesa ubicada en la cima de un acantilado muy alto y lo captura con sus garras, transportándolo rápidamente (ya muerto debido a que las potentísimas garras del águila real han matado en cuestión de muy pocos segundos al mamífero, atravesando su cabeza) mediante vuelo coordinado hasta su nido localizado a muchos cientos de metros de distancia, lo cual fue filmado desde diferentes ángulos durante toda su trayectoria con tres cámaras cinematográficas de 35 mm situadas sobre distintos riscos circundantes, demostrando que gracias a los grandes planos de sustentación de sus alas, el águila real es capaz de transportar animales mucho más pesados que ella misma, además de ser una gran acróbata aérea a pesar de su gran tamaño, por lo que puede también capturar aves muy pequeñas en pleno vuelo.


La agudeza visual del águila real constituye uno de los sistemas ópticos más perfectos de la Naturaleza y permite a esta gran rapaz superdepredadora localizar a sus presas a distancias de hasta 1 km.

RECUPERADOR DEL ANCESTRAL ARTE DE LA CETRERÍA
Por otra parte, Félix revivió en España el ancestral arte de la caza con águila real, una modalidad de cetrería prácticamente extinguida tanto en España como en el resto del mundo, con la principal excepción de los cazadores con águila real kazajos, kirguises y mogoles denominados Berkutchi o Kusbegi, que han desarrollado la actividad cinegética con este ave rapaz (denominada berkuts en su idioma) durante miles de años, sobre todo en las regiones norte y centro de Kazakhstan, una tradición y conocimientos que fueron transmitidos de manera muy secreta de padres a hijos y que ha convergido desde un punto de vista histórico en las montañas Altai de Asia Central, con la ciudad de Bayan Ulgii como núcleo principal.

Al Dr. Félix Rodríguez de la Fuente siempre le fascinó el alto nivel de destreza necesario para entrenar a un águila real así como la ancestral sinergia entre la rapaz y el hombre cazando juntos como uno de los métodos más antiguos de obtención de alimento, cuya técnica Félix sabía que había sido dominada durante la Edad del Bronze en las estepas de Eurasia hace miles de años (tal y como confirman los petroglifos de la Era Andronov) y en Europa Occidental durante la Edad Media, y finalmente logró convertirse en un experto de talla mundial en el entrenamiento tanto de águilas como de halcones.

La cetrería era un arte que llevaba aproximadamente 150 años extinguido en España, y cuando Félix Rodríguez de la Fuente inició su actividad en esta faceta, no había ningún halconero en la Península Ibérica.

Ya siendo adolescente en Poza de Sal, Félix arriesgó con frecuencia su vida escalando equipado únicamente con una gruesa cuerda para acceder a los nidos de diferentes aves de presa ubicados en zonas muy altas de montañas, a fin de verlas y estudiar su comportamiento desde distancias muy cortas. Tan ardiente era su deseo por contemplarlas desde sólo unos pocos metros, que habitualmente llevaba consigo los prismáticos de su padre para observarlas también mientras planeaban a gran altura sobre sus nidos.

A fuerza de tenacidad y perseverancia, Félix Rodríguez de la Fuente se las arregló para adquirir profundos conocimientos de cetrería mediante la lectura de muchos libros casi olvidados escritos durante los siglos XIII y XIV por el Príncipe Don Juan Manuel, el Canciller Pero López de Ayala y Juan Sant-Fahagún, junto con la obra sobre caza con azor practicada en el siglo XVI por Fadrique de Zúñiga y Sotomayor, etc, hasta llegar a ser un referente mundial sobre cetrería durante mediados de los años sesenta, comenzando a escribir muchos libros hoy en día indispensables sobre este arte cinegético, viviendo a diario y adiestrando a una amplia variedad de rapaces, especialmente el sublime Halcón Peregrino, especie de la cual fue la máxima autoridad mundial hasta su muerte en 1980.

Así pues, el Dr. Félix Rodríguez de la Fuente constituyó el vínculo de conexión entre los libros medievales españoles sobre cetrería y una obra muy importante también conocida por el naturalista español: De Arte Venandi cum Avibus, escrita en 1248 por el Emperador Federico II Hohenstaufen, otro manual de referencia sobre el estudio de las aves de presa, y a través de su profunda investigación sobre etiología, ecología e interacciones poblacionales de estas rapaces, disertó a finales de los años cincuenta, con veinte años de anticipación, con respecto a conceptos que aparecerían en 1979 en la gran obra Ecología Poblacional de las Aves Rapaces, escrita por el Dr. Ian Newton en 1979.

Con sus tratados y documentales divulgativos sobre aves de presa, Félix Rodríguez de la Fuente se convirtió en el pionero de la reintroducción de la cetrería en Europa, técnicamente conocida como práctica de la caza con aves (incluso antes que J.G. Mavrogordato, que era en aquellos momentos el otro gran experto mundial sobre Cetrería, cuya actividad tenía lugar en Estados Unidos y autor en 1966 del libro A Falcon in the Field), varias décadas antes de la aparición de obras posteriores relevantes sobre cetrería como The History and Practices of Falconry (escrita en 1982 por A.Oswald), Falconry, Art and Practice (escrita en 1992 por E. Ford), Takajou ha kataru-Takajou Niwa Arie san wo shinobu (Memoria del Halconero Japonés Niwa Arie, escrita por Wakasuri Minogus en 1996), Understanding the Birds of Prey (escrita en 1996 por N. Fox), Sokolinaya Okhota (Cetrería, escrito en 2005 por Viktor Mikhalovich), Duck Hawking-The Art of Falconry (escrita en 2004 por Joe Roy), The Apprentice Study Guide of the California Hawking Club (escrita en 2004), etc.

El Dr. Félix Rodríguez de la Fuente con su gran amigo Aurelio Pérez, destacado naturalista soriano conocido como "La mano derecha de Félix". Fallecido en Abril de 2008, Aurelio Pérez fue un experto de talla internacional en cetrería y aves de presa, trabajando durante muchos años como ayudante de Félix durante el rodaje de documentales sobre rapaces, especialmente águilas y halcones. Fue un gran entrenador de diferentes especies de águilas, halcones y algunos mamíferos como lobos y ginetas.

Aurelio Pérez alcanzó también fama internacional por su adiestramiento de la famosa "milana bonita" que aparece en la película Los Santos Inocentes, dirigida por Mario Camus e inspirada en una novela escrita por Miguel Delibes.

ENCICLOPEDIA SALVAT DE LA FAUNA, UNA OBRA CUMBRE EN SU GÉNERO

Fauna Mundial, una de las más importantes enciclopedias de la historia sobre animales y naturaleza en general jamás publicada en el mundo. Aparecida a mediados de los años setenta, logró un éxito sin precedentes, siendo traducida a 16 idiomas y superando la cifra de 30 millones de volúmenes vendidos.

Esta extraordinaria obra, también conocida en ediciones sucesivas durante los años ochenta y noventa como Enciclopedia Salvat de la Fauna, fue el fruto de un formidable equipo reunido por la Editorial Salvat, compuesto por el Dr. Félix Rodríguez de la Fuente (que fue el motor impulsor y autor de la mayoría de los textos) y otros emergentes jóvenes profesionales de la biología, el naturalismo, las artes y la fotografía:

- Javier Castroviejo (biólogo).
- Miguel Delibes (biólogo).
- Cosme Morillo (biólogo).
- Pedro de Andrés (biólogo).
- Carlos G. Vallecillo (biólogo).

- José Lalanda (dibujante).
- Ernesto Cerra (dibujante).
- Marcelo Socias (dibujante).
- Miguel Angel L. Castaños (dibujante).

- Des Barlett (fotógrafo).
- Bruce Coleman (fotógrafo).
- J. Burton (fotógrafo).
- Nino Cirani (fotógrafo).
- Gatti (fotógrafo).
- B. Hunter (fotógrafo).
- W.T.Miller (fotógrafo).
- N. Myers (fotógrafo).
- M. Quarishy (fotógrafo).
- E. Hosking (fotógrafo).
- J. Robert (fotógrafo).
- A. Root (fotógrafo).
- S. Trevor (fotógrafo).
- C. de Klemm (fotógrafo).

Fauna Mundial (Enciclopedia Salvat de la Fauna) fue en gran medida realizada con enorme esfuerzo constante, bajo el mando de Félix Rodríguez de la Fuente, cuya capacidad de trabajo y potencia física era virtualmente imposible de seguir, algo que frecuentemente obligaba al equipo a trabajar literalmente al borde de la extenuación. Por ejemplo, hubo ocasiones en que debido al muy alto nivel de calidad que Félix quería para esta obra, hacía repetir a Miguel Delibes de Castro (hoy por hoy prestigioso biólogo de nivel internacional, por entonces muy joven) sus textos hasta cinco veces, hasta que tenían la precisión deseada por El Maestro.

Las condiciones de trabajo durante el desarrollo de esta colosal obra fueron muy duras, ya que se ponía a la venta semanalmente en los kioscos españoles mediante fascículos, que eran posteriormente encuadernados en distintos volúmenes hasta llegar a las 3.000 páginas -una cifra asombrosa para la época- que constituían la totalidad de la enciclopedia ilustrada.

Con esta obra de auténtica talla mundial, Editorial Salvat consiguió llevar a cabo con pleno éxito el mayor tour de force jamás realizado en este ámbito, y la necesidad de poner a la venta un nuevo fascículo cada semana para la ingente cantidad de compradores, trajo consigo muchos momentos de máximo stress y nerviosismo al equipo del Dr. Félix Rodríguez de la Fuente.

Félix parecía no cansarse nunca, su energía no tenía límites y el brutal ritmo de trabajo que establecía ponía a prueba a todo el mundo, lo cual a pesar de la rudeza de la experiencia, convirtió a la Enciclopedia Salvat de la Fauna Mundial en una escuela vital de incalculable valor para cada uno de los miembros del equipo.

Los textos en español de esta obra están considerados entre lo mejor jamás realizado sobre Fauna en el mundo, y fueron en su mayor parte escritos por Félix Rodríguez de la Fuente (que los dictaba a una secretaria que los pasaba a máquina), que supervisaba igualmente de modo muy minucioso los textos creados por otros miembros del equipo, línea por línea, palabra por palabra, hasta conseguir el inefable nivel de exactitud, riqueza de contenidos e impacto informativo tan de su agrado.

El éxito de esta legendaria Enciclopedia Salvat de la Fauna fue tal que todas las sucesivas ediciones hechas entre principios de los años setenta y finales de los noventa se vendieron rápidamente y fueron codiciadas por los millones de admiradores de Félix Rodríguez de la Fuente tanto en España como en otros países, ya que fue traducida a muchos idiomas y hoy en día se halla disponible en la inmensa mayoría de museos de naturaleza y fauna por todo el mundo, tal y como Miguel Delibes de Castro tuvo ocasión de comprobar, año tras año, tras la muerte de Félix Rodríguez de la Fuente en 1980, en sus viajes por diferentes países.

En otro orden de cosas, aparte del elevado número de fotógrafos profesionales contratados por Editorial Salvat para captar las imágenes de esta obra única, Félix Rodríguez de la Fuente aportó gran cantidad de documentación gráfica que incluía muchas diapositivas en color realizadas por él, que potenciaron notablemente la obra, sin olvidar los maravillosos dibujos de animales tanto en blanco y negro como en color y detalles específicos de ellos hechos por los anteriormente citados dibujantes profesionales, que también reforzaron mucho la calidad de esta obra de arte editorial realizada con parámetros artesanales (baste decir por poner sólo un ejemplo, que en una de las páginas dedicadas al elefante africano hay tres dibujos que muestran la evolución de sus dientes de leche y molares entre los 13 y los 45 años de edad), junto con mapas muy interesantes que mostraban la distribución geográfica de cada especie en diferentes países y continentes, así como cada nombre científico y zoológico, complementado con información muy exhaustiva sobre sus rasgos físicos, costumbres, ciclos reproductivos, técnicas de caza, longevidad, etc.

Pero hay más.

Esta Enciclopedia Salvat de la Fauna es incluso más única en su género y destacada porque Félix Rodríguez de la Fuente escribió bajo cada fotografía y dibujo (y hay muchos miles) un texto de pie de foto tremendamente detallado explicando lo que ocurría o se veía en la imagen, con increíble conocimiento y pasión por la Fauna.

Esto es absolutamente asombroso. Félix puede abordar con gran profundidad y plena improvisación escribir sobre tres fotos en las que se ve a un leopardo cazando un papión joven en el Parque Nacional de Amboseli en Kenya (página 18 capítulo 17 titulado Los Conquistadores de Tierra Firme dedicado a los papiones), sobre un dibujo que representa el cortejo de Lavanco dabchick Podiceps cirstatus con la ceremonia del descubrimiento y las subsiguientes tres fases de encuentros (Capítulo 76 del Volumen Eurasia/Norteamérica), sobre un dibujo que plasma el oryx del Kalahari (Capítulo 28 Las Tierras Aridas del Sudoeste Africano), sobre una fotografía de un caballo Przewalski en Mongolia (Capítulo 56 Ungulados de Las Estepas), sobre una imagen en la que se aprecia al gorila blanco "Copito de Nieve" en el zoo de Barcelona (maravilloso capítulo 41 El Gorila, explicando el modo en que bebe humedeciendo su mano siguiendo la técnica utilizada por sus congéneres cuando se hllan en libertad en su hábitat natural), sobre una fotografía que muestra al sublime Lince Ibérico cazando mediante emboscada (Capítulo 59 El Lince Mediterráneo), etc.

Félix Rodríguez de la Fuente poseía profundísimos conocimientos sobre fauna y naturaleza así como pasión y energía en cantidades ingentes, que le permitían escribir un pie de foto altamente informativo bajo cada imagen, siendo éste otro aspecto más en el que la Enciclopedia Salvat de la Fauna brilló con luz propia.

Félix Rodríguez de la Fuente realizando anotaciones en un cuaderno dentro de una tienda de campaña en Kenya, durante uno de los frecuentes viajes que hizo a Africa - un continente que siempre le fascinó- durante los años setenta.

MAXIMA AUTORIDAD MUNDIAL EN EL CONOCIMIENTO DEL LOBO IBÉRICO


Félix Rodríguez de la Fuente abrazando con fuerza a un lobo. Su gran conocimiento sobre esta especie de cánidos salvajes así como su contacto directo con algunas manadas de lobos durante décadas, hicieron que fuera considerado jefe por el resto de miembros del grupo como si se tratara de un lobo más. El lobo que aparece en la imagen podría fácilmente matar a Félix con un solo mordisco, pero en este caso la total confianza mutua entre ser humano y animal lo evita.


Félix Rodríguez de la Fuente con un cachorro de lobo ibérico en Pelegrina (Guadalajara). El gran amor, admiración y conocimiento de esta especie por parte del mítico naturalista español fue un importantísimo catalizador de la supervivencia de esta especie, ya que a finales de los años sesenta quedaban en España unos 200 lobos y hoy en día hay aproximadamente 2.000.

Un muy joven Félix Rodríguez de la Fuente acariciando un lobo. Félix Rodríguez de la Fuente trascendió los estudios iniciales sobre observación de los gestos de los lobos llevados a cabo por el etólogo Schenkel en 1947 con láminas en color (en las que según las distintas posturas de la cola podía inferirse el grado de amenaza con que se dirige a los restantes componentes de la manada), y con la ayuda de su gran equipo de dibujantes (Iván Fernández, Josechu Lalanda, etc) desarrolló un profundísimo estudio científico sobre el lenguaje corporal de los lobos, sus diversas expresiones faciales y su significado, así como la fuerte jerarquía social dentro de la manada, incluyendo los roles de dominancia, sumisión y normas de conducta perfiladas por señales olfativas, táctiles, auditivas y visuales, así como marcadas pautas de sumisión que eviten enfrentamientos agresivos de carácter letal y que permitan la subsistencia de todos los componentes del grupo.

Impresionante imagen de Félix Rodríguez de la Fuente completamente extasiado mientras acaricia y huele a un lobo.


Un muy feliz Dr. Félix Rodríguez de la Fuente bajo los efectos de un ataque de pasión el día que escuchó por vez primera la mundialmente famosa banda sonora original de la serie de TV El Hombre y la Tierra. El hombre que está de pie junto a él es Antón García Abril, gran compositor español autor de la citada partitura.

El Dr. Félix Rodríguez de la Fuente estrechando la mano del Rey Juan Carlos, mientras le es otorgado uno de los muchos premios que recibió durante su trayectoria profesional.

Félix Rodríguez de la Fuente con una gineta. Viendo imágenes como ésta, es fácil entender por qué tanto durante su vida como tras su fallecimiento este hombre fue conocido en todo el mundo como "El Amigo de Los Animales".

LOS MÍTICOS CUADERNOS DE CAMPO DEL DR. FÉLIX RODRÍGUEZ DE LA FUENTE
En el marco de la amplísima producción de Félix Rodríguez de la Fuente, destaca también sobre manera una obra gráfica única, muy sui géneris, considerada hoy en día, 30 años después de su muerte, como un auténtico tesoro informativo y visual sobre diferentes especies animales de la Península Ibérica: sus mundialmente famosos Cuadernos de Campo, elaborados durante dos décadas de duro trabajo, editados entre 1978 y 1979 y que representan de manera increíblemente detallada todos los aspectos - incluso los más recónditos- de cada uno de sus muy queridos animales.

Muchos quioskeros de las principales ciudades españolas recuerdan como semanalmente se agotaban con enorme rapidez todos y cada uno de los Cuadernos de Campo de Félix Rodríguez de la Fuente, hasta el punto de que con frecuencia se desarrollaba un inevitable tráfico de influencias para asegurar la reserva, que en ocasiones desembocaba en situaciones de tensión, ya que todo el mundo anhelaba tenerlos cuanto antes y la expectación era máxima entre los incondicionales seguidores y admiradores de Félix, que eran prácticamente todo el país.

Hemos podido constatar que todavía hoy, estos Cuadernos de Campo son ávidamente buscados por naturalistas, biólogos, zoólogos y entusiastas de la naturaleza y fauna en su conjunto.

La colección completa, lanzada al mercado por Editorial Marín, estaba constituída por 60 Cuadernos de Campo con 52 páginas cada uno, todos ellos verdaderas obras maestras que mezclaban textos de gran riqueza informativa que describían con todo lujo de detalle, enorme pasión y vasto conocimiento las más diversas particularidades de las especies tratadas: aspecto y tamaño, variaciones dependiendo de la edad, técnicas de caza, distribución ecológica, distribución geográfica, modos de detectarlas, ranking ecológico, territorialidad, hábitos alimenticios, períodos y rituales de reproducción, cubiles para la reproducción, comportamiento y desarrollo de las crías, cohesión familiar, clasificación zoológica, papel y ranking ecológico, marco cronológico de los ciclos reproductivos, enemigos naturales, velocidad y resistencia, señales acústicas, jerarquía, lenguaje corporal, etc, todo ello profusamente complementado por un gran surtido de dibujos, diagramas, esquemas, estadísticas, gráficos de barras, mapas geográficos, etc, de muy alta calidad, en color y con excelente nivel de reproducción en papel.

El lanzamiento al mercado por parte de Editorial Marín hace aproximadamente 30 años de los Cuadernos de Campo del Dr Félix Rodríguez de la Fuente representó otro hito importantísimo tanto en la historia del Naturalismo como del Movimiento Ecologista.

En esta imagen podemos ver la colección completa de 60 pequeños volúmenes de los Cuadernos de Campo del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, treinta años después de la muerte de El Maestro. Photo: José Manuel Serrano Esparza.

Portada del Número 1 de los Cuadernos de Campo del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, dedicado al Lince.

Páginas 10 y 11 del Cuaderno de Campo Número 1 del Dr. Félix Rodríguez de la Fuente, en las que se explica la prodigiosa vista del Lince Ibérico, que le permite localizar a su amplio abanico de presas a largas distancias.

Páginas 12 y 13 del Cuaderno de Campo Número 1 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, en las que se informa sobre la distribución ecológica del Lince Ibérico.

Páginas 30 y 31 del Cuaderno de Campo Número 1 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, incluyendo gráfica de crecimiento e importantes datos sobre la evolución de los sublimes cachorros de Lince Ibérico durante sus primeros meses de vida.

Portada del Número 4 de los Cuadernos de Campo del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, dedicado a las Rapaces Nocturnas.

Páginas 6 y 7 del Cuaderno de Campo Número 4 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, con dibujos de altísima calidad y gran realismo representando al Búho Real, el Búho Chico y el Autillo, así como datos muy fidedignos y variados sobre aspecto y dimensiones de estas tres rapaces nocturnas, sin olvidar la siempre presente nomenclatura científica de cada especie conforme a la clasificación zoológica de Linneo.

Páginas 8 y 9 del Cuaderno de Campo Número 4 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, también con información sobre aspecto y dimensiones de otras tres rapaces nocturnas: el Cárabo, la Lechuza y el Mochuelo. Obsérvense las anotaciones de puño y letra de Félix, que aparecían habitualmente en todas las páginas.

Páginas 10 y 11 del Cuaderno de Campo Número 4 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, un vívido ejemplo del tesoro informativo biológico-naturalista y paradigma de originalidad que definió a esta obra sumamente científica y a la vez muy entrañable, compuesta por 60 tomos de pequeño formato. Puede apreciarse como Félix explica de modo muy gráfico tanto las armas de las rapaces nocturnas como las fases de su actividad cinegética.

Páginas 28 y 29 del Cuaderno de Campo Número 4 de Félix Rodríguez de la Fuente, donde profundiza una vez más de modo exhaustivo, en este caso con dibujos en blanco y negro muy ilustrativos así como profusión de datos y anotaciones de su puño y letra sobre las técnicas de caza de Búho Real, Cárabo, Lechuza, Lechuza Gavilana y Mochuelo Chico.

Portada del Número 3 de los Cuadernos de Campo del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, dedicado al Lobo Ibérico.

Páginas 6 y 7 del Cuaderno de Campo Número 3 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, donde el gran naturalista da rienda suelta a su pasión por este animal y aporta una pléyade de datos sobre su aspecto, con diferentes detalles y variantes cromáticas sobre diversas zonas de su anatomía, peso y dimensiones, etc. La riqueza de contenido de sus textos es simplemente soberbia, así como el aderezo del excelente dibujo en color, de notable realismo, y las anotaciones de puño y letra por parte de Félix, cuya capacidad de trabajo era asombrosa.

Páginas 18 y 19 del Cuaderno de Campo Número 3 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, describiendo la distribución ecológica del Lobo Ibérico. Por si ello fuera poco, en la zona inferior puede apreciarse un gráfico que indica el tiempo de permanencia del cánido en cada uno de sus biotopos representados. El conocimiento de esta especie por parte de Félix Rodríguez de la Fuente le convirtió en el mayor experto mundial en la misma (siéndolo también de otras como el Halcón Peregrino, el Lince Ibérico, el Aguila Real, el Aguila Imperial, el Azor, el Búho Real, etc), y sus famosos Cuadernos de Campo han sido durante tres décadas una importante fuente de inspiración en las salidas a la Naturaleza de miles y miles de biólogos, naturalistas, ornitólogos, conservacionistas, etc, desde 1980, año de su muerte, hasta la actualidad.

Páginas 42 y 43 del Cuaderno de Campo Número 3 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente sobre Lobeznos, Lobatos y Lobos, con todo tipo de información sobre composición de las camadas, períodos de lactancia, cambios en su pelaje, fases de evolución hasta convertirse en lobos adultos, etc.

Páginas 30 y 31 del Cuaderno de Campo Número 3 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, con reseñas sobre velocidad y resistencia de las diferentes presas naturales del Lobo Ibérico, superdepredador por excelencia, que pese a ser más lento que ellas (y existir otras especies de cánidos como el galgo que le aventajan en 20 km/h en el sprint). consigue darlas caza gracias a su formidable resistencia a la fatiga y a su capacidad para mantener un ritmo constante de carrera durante muchas decenas de km.

Páginas 44 y 45 del Cuaderno de Campo Número 3 del Dr Félix Rodríguez de la Fuente, con ulterior información exhaustiva sobre el primer año de vida del lobo ibérico, incluyendo las etapas previas de celo y gestación, así como la lactancia y su desarrollo subsiguiente dentro del clan familiar hasta convertirse en lobo adulto. Obsérvese la precisión de los dibujos que muestran tanto la dentición de leche de un lobezno como la de un lobo adulto y la muy minuciosa representación de incisivos, caninos, premolares y molares, junto con todo tipo de mediciones y estadísticas hechas por Félix.

GUERRA ACÚSTICA ENTRE RAPACES NOCTURNAS Y ROEDORES: EL HOMBRE Y LA TIERRA CONSOLIDA AÚN MÁS SU POSICIÓN COMO REFERENTE MUNDIAL INCUESTIONABLE EN CALIDAD DE IMAGEN, SONIDO Y COMENTARIOS ENTRE LAS SERIES DOCUMENTALES DEDICADAS A FAUNA Y NATURALEZA, SUPERANDO CLARAMENTE INCLUSO A LAS PRODUCCIONES AUDIOVISUALES DE NATIONAL GEOGRAPHIC
Entre 1974 y 1980 Félix Rodríguez de la Fuente consiguió con su serie El Hombre y la Tierra unos niveles cualitativos de imagen, sonido y profundidad de contenido de los comentarios desconocidos hasta entonces en el mundo en el ámbito de los documentales sobre vida salvaje y fauna, utilizando para ello cámaras profesionales cinematográficas de 35 mm Arri y Mitchell y grabadores high end monofónicos Hi-Fi a carrete abierto Nagra III NP y Nagra 4.2, todo ello complementado por sus propias palabras repletas de inmenso conocimiento y pasión, lo cual provocó el asombro y admiración por parte de Keenan Smart (Director de la Unidad de Naturaleza de National Geographic), ya que hasta entonces los mejores documentales sobre animales eran realizados con cámaras Bolex de 16 mm - o bien Super 16 mm en contadas ocasiones- y ópticas fijas Kern Switar o zooms Angenieux.


La llegada de Félix Rodríguez de la Fuente y sus primeros capítulos de la serie El Hombre y la Tierra rodados en 1974 en la selva venezolana con pesadas cámaras de cine de 35 mm causaron sensación en el entorno naturalista y biológico internacional, lo cual sería posteriormente corroborado por ulteriores capítulos sobre Fauna Ibérica, con especies tales como el lobo, el águila real, el águila imperial, el lince ibérico, la gineta, etc.

No obstante, existen en mi opinión tres capítulos en los que El Hombre y la Tierra alcanza unas cotas todavía más extraordinarias si cabe y que será muy difícil superar en el futuro: los dedicados a las rapaces ibéricas nocturnas (búho real, lechuza, búho chico, cárabo, autillo y mochuelo) en su guerra acústica nocturna contra los roedores.








Con su habitual maestría presentando sus documentales como relatos, Félix Rodríguez de la Fuente nos muestra con imágenes y sonidos como en plena oscuridad de la noche las rapaces nocturnas ubicadas en sus atalayas se mantienen quietas tratando de localizar mediante el oído a los roedores para cazarlos, mientras que éstos se esfuerzan por alimentarse realizando los menores movimientos y ruido posibles a fin de no ser detectados.

Estos capítulos constituyen además un prodigio de tecnología cinematográfica y de ingeniería de sonido, que comienza con la instalación de diminutos radiotransmisores de onda corta en las plumas rectrices de distintas especies de rapaces nocturnas elegidas con anterioridad, cuya ubicación es monitorizada por el naturalista Carlos Sanz (entonces estudiante de Ciencias Biológicas y hoy en día prestigioso naturalista) con un receptor short wave Falconer 4 que permite realizar el seguimiento de las aves de presa nocturnas hasta una distancia de 8 km.

Posteriormente, se construye un hide a 3 metros de altura, en cuyo interior pasan muchas noches enteras Félix Rodríguez de la Fuente, un cámara (habitualmente Teodoro Roa) y el experto técnico de sonido Manuel Peña.

Asistimos a momentos fascinantes que marcaron un antes y un después a nivel internacional en este tipo de documentales.














La experiencia y talento de Teodoro Roa con la cámara Arri de 35 mm y sus objetivos cinematográficos, sobre todo a plena apertura, son impresionantes, jugando con los planos de nitidez y los más diversos encuadres como un consumado maestro y haciendo uso de una amplísima gama de técnicas cinematográficas en condiciones de muy baja luminosidad, consiguiendo unos resultados espléndidos que realzan notablemente la majestuosa belleza de las rapaces nocturnas ibéricas que van apareciendo sucesivamente en pantalla a la escucha y subsiguientemente cazando a sus presas en la oscuridad de la noche.

La calidad óptica de los objetivos a su máxima luminosidad es incontestable. Los operadores de cámara cinematográfica de El Hombre y la Tierra están utilizando a diafragma abierto las mejores ópticas cinematográficas disponibles en el mundo en ese momento y ello se nota en la impresionante calidad de imagen, ya que por muy bueno que pueda ser un televisor Full HD de plasma, LCD o LED entre 32 y 50 pulgadas, si la calidad de las ópticas con que son tomadas las imágenes no da la talla, es virtualmente imposible obtener imágenes de calidad profesional.

Igualmente, el uso frecuente que se hace de muy avanzadas técnicas cinematográficas a alta velocidad (slow motion) por parte de los operadores de cámara de cine de 35 mm de El Hombre y la Tierra añade aún más dramatismo y originalidad si cabe a estas sobrecogedoras imágenes.

Por su parte, Manuel Peña realiza un trabajo magistral grabando todos los sonidos con su magnetófono profesional hi-fi monofónico Nagra III NP con sincronización Neopilot a cámara, habiendo instalado previamente varios micrófonos en distintas zonas del bosque donde se desarrollaba la acción. 

El ruido acústico habitualmente producido por la combinación de micrófono y preamplificador (en éste último originado tanto por su ruido inherente como por la señal de ruido denominada ruido térmico) durante la grabación de sonidos de bajo nivel decibélico, han sido reducidos a niveles prácticamente inapreciables, con un admirable dominio del fon y la zona ASA "A" de respuesta de frecuencia.



Se aprecia perfectamente como el modulómetro del grabador Nagra III NP alcanza picos decibélicos de intensidad intermedia cuando los roedores comen y cotas máximas cuando las rapaces nocturnas hacen ruido al atraparles con sus garras, al tiempo que los roedores gritan.

La calidad de registro sonoro es soberbia, habiendo sacado los técnicos de sonido de Divisa Ediciones el máximo partido de la reducción a niveles prácticamente insignificantes del ruido de modulación, las distorsiones de rango medio y el ruido de cinta llevada a cabo en las bobinas originales de 6.35 mm por Manolo Peña con el Nagra III NP a velocidad de 19,05 cm/segundo durante la toma de sonido original (factor clave donde los haya) hace más de treinta años, corroborándose una vez más que la labor de un experto técnico in situ y su modo de trabajar son fundamentales para la obtención de un excelente sonido directo, así como la posibilidad de utilizar micrófonos -distintos a los incorporados en una cámara- y equipos high end de grabación y filmación (Nagra y Arri respectivamente) durante la segunda mitad de los años setenta, en perfecta sincronización mediante el sistema Neopilot.

En todo momento el espectador siente la emoción del directo, debido a la impecable focalización de la imagen sonora, en un sonido monofónico Hi-Fi que trasciende claramente el PCM Stereo y gracias a las magníficas tomas de sonido originales realizadas hace más de treinta años y a la digitalización profesional del sonido de las bobinas full track llevadas a cabo por Divisa Ediciones, se sitúa en calidad sonora ligeramente por encima de muchas grabaciones digitales modernas de CD realizadas con codificación/filtrado HDCD y en la antesala del nivel cualitativo obtenido mediante codificación digital DSD para la grabación en formato Super Audio CD.

Es una calidad de sonido extraordinaria, comparable a la calidad de registro sonora monofónica original de las cintas de 1/4 de pulgada (6.35 mm) grabadas por expertos ingenieros de sonido británicos (pertenecientes al equipo de rodaje) con cada uno de los dos magnetófonos profesionales Nagra III NP conectados sin cable a dos cámaras cinematográficas (Arri 16 BL de 16 mm con zoom Angenieux 12-120 mm f/2.2 con magazines de 400 pies) mediante sistema de sincronización Neopilot crystal y utilizados durante la filmación de las fases iniciales de los ensayos Get Back Sessions en los Estudios Twickenham de St Margarets, Londres, el 3 de Enero de 1969, que fueron editadas 33 años después como CD estereofónico por Yellow Dog Records en 2002 con el título The Beatles Stereo A-Cam B-Cam at Twickenham. January 3th 1969, aprovechando que durante ese día en concreto, ambos Nagras III NP funcionaron a la vez, cada uno con sus propios micrófonos, por lo que más de tres décadas después, fue posible sincronizar los sonidos de las diferentes bobinas analógicas Nagra A y B de 16 minutos de duración cada una grabadas el 3 de Enero de 1969 por cada uno de los magnetófonos profesionales Nagra y obtener un muy buen efecto stereo a partir de las dos soberbias tomas monofónicas originales, algo que no fue posible con el resto de cintas Nagra de las Get Back Sessions, ya que a partir del 4 de Enero de 1969 y hasta el 31 de dicho mes en que terminaron, las dos mencionadas cámaras Arri de 16 mm comenzaron a usar la misma fuente sonora.

La relación calidad/ruido, la extensión de la curva de respuesta en frecuencia y la estratificación de los planos sonoros son excelentes. 

Hay una completa inmersión del oyente en el ambiente que había en el momento de la toma sonora real en directo, una especie de regreso al futuro en el que se comparten vivencias y emociones con Félix y sus colaboradores, del mismo modo que las previamente comentadas grabaciones Nagra de los Beatles en Twickenham Studio hacen creer que se está allí en directo, sobre todo si la escucha se realiza con auriculares.

En ambos ejemplos, el sonido lleva ADN Stefan Kudelski.

La tensión es máxima mientras el telespectador contempla las evoluciones de esta Guerra Acústica entre rapaces nocturnas y roedores, apreciándose de modo simultáneo como Félix, Manolo Peña y un cámara permanecen inmóviles en el interior del hide durante noches enteras a 3 metros de altura, a temperaturas muy bajas, alcanzándose el clímax audiovisual en cada ataque de búho real, lechuza, búho chico, cárabo, autillo y mochuelo sobre ratones, lirones caretos, etc.

Gracias a la soberbia amplificación de sonido de la toma en directo con micrófonos instalados en el bosque y conectados al Nagra III NP Hi-Fi, podemos escuchar los sonidos producidos por los roedores mientras se alimentan, el vuelo de las rapaces nocturnas cuando cambian de atalaya para optimizar la localización de sus presas, los vertiginosos vuelos en picado sobre los roedores a los que dan caza, el momento en que las garras de cada rapaz se clavan en el cuerpo de sus víctimas y como éstas chillan durante sus últimos instantes de vida.

Una vez más, la técnicamente excepcional toma de sonido original (de la que en gran medida todo depende), ha logrado obtener una fabulosa precisión en la captación fidedigna del ambiente sonoro del momento, perfectamente dimensionado, con una escena sonora muy palpable, abundante densidad informativa y exactitud en la presentación de los diferentes planos en los que hay sonidos, lo cual origina gran realismo y notable reducción de la fatiga auditiva, ya que además la construcción enteramente metálica del Nagra III NP garantiza una impecable integridad estructural e inmunidad respecto a todo tipo de vibraciones externas.

Son sonidos prácticamente imperceptibles en plena oscuridad de la noche, pero la nitidez en la lectura de señales acústicas de baja intensidad decibélica por parte del Nagra III NP se revela de inestimable ayuda para la plena diferenciación de los más diversos sonidos emitidos por las distintas especies de rapaces y roedores, sin olvidar unos silencios muy puros y pronunciados en los momentos de impasse que realzan todavía más la impronta sonora de la toma monofónica profesional en Alta Fidelidad.



Todo indica que Félix sabía que las futuras tecnologías digitales permitirían este inmenso salto cualitativo audiovisual con el que tanto la presente generación como las venideras podrán ver su inmenso legado en grandes pantallas de TV (plasma, LCD y LED), con calidad próxima a la de una sala cinematográfica, tanto en imagen como en sonido.

Este hombre era realmente extraordinario, irrepetible e inolvidable. 

Un visionario multidisciplinar que se adelantó a su tiempo en más de tres décadas y un profundo humanista, muy exigente en el trabajo con sus colaboradores pero sobre todo consigo mismo, con frecuencia hasta casi la extenuación.

Cabe destacar que aunque tras la muerte de Félix, durante la década de los ochenta se utilizaron mayormente en el ámbito profesional cinematográfico y de audio high end grabadores profesionales con calidad de sonido y prestaciones superiores a las del Nagra III NP como el Nagra IV-S con sincronización Neopilot, el Nagra IV NQS-TC con Time Code y cabezales separados para grabación y reproducción (ambos con opciones de velocidad de 38, 19 y 9.5 cm/seg) y en menor porcentaje los fabulosos Stellavox diseñados por Georges Quellet (con todavía mayores niveles de miniaturización electrónica y precisión mecánica) como el SP-8 y el SU-8, la calidad de sonido, fiabilidad y resistencia al más duro trato profesional del Nagra III (diseño icono de Stefan Kudelski que revolucionó la grabación de sonido profesional de la industria cinematográfica de Hollywood desde principios de los sesenta) era todavía tan notable que muchos científicos y naturalistas continuaron usándolo en sus experimentos y pruebas de campo.
Por poner sólo un ejemplo, el experto ornitólogo norteamericano Douglas A. Nelson del Centro de Investigación de la Universidad Rockefeller en Millbrook, Nueva York, utilizó en 1986 Nagra III a velocidad de 19 cm/seg y acoplado a micrófono Sennheiser MKH 816 para grabar sonidos emitidos por gorriones comunes de campo en 98 zonas diferentes, siendo transferido el sonido a un ordenador a una frecuencia de muestreo de 20.8 KhZ para su análisis mediante un programa especial de software y posterior estudio, lo cual le permitió establecer que los gorriones de campo (Pusilla del Spizella) integran información de al menos cinco rasgos diferentes en el reconocimiento del canto propio de su especie, pero dan mayor importancia a la información procedente de un rasgo constante y a la frecuencia del canto que a la información procedente de rasgos variables.

Queda claro pues, que con respecto a calidad de sonido, Félix Rodríguez de la Fuente utilizó lo mejor de lo mejor disponible en el mundo hasta su muerte en 1980 y consciente de la importancia fundamental de la toma original, se rodeó de grandes técnicos de sonido como Manuel Peña y Antonio Torreblanca para optimizar todo lo posible los resultados finales, lo cual consiguió plenamente, ya que además de la excepcional calidad de imagen, los DVDs de El Hombre y la Tierra permiten disfrutar de una experiencia audiófila Hi-Fi en sonido monofónico o bien de un excelente y muy espectacular sonido envolvente Dolby 5.1, todo ello gracias al buen hacer de los ingenieros de sonido de Divisa Ediciones, casi treinta años después de los hechos.


CANADÁ: EL BROCHE DE ORO A UNA CARRERA EXCEPCIONAL
Invitado por el Gobierno de Canadá y con el apoyo del Servicio de Protección de la Naturaleza del Canadá, el Departamento de Pesca y Medio Ambiente de Ottawa, Parques Canadá Ottawa, la Embajada del Canadá en Madrid y el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ottawa, Félix Rodríguez de la Fuente rodó entre 1979 y 1980 los 14 últimos capítulos de la serie El Hombre y la Tierra en Canadá, quedando profundamente impresionado y enamorado tanto por los paisajes como la rica fauna de este gran país, que reflejó magistralmente con filmaciones excepcionales entre las que cabe destacar:

a) Parque Nacional Nahanni.- Llegados en avión desde Whitehorse (capital del estado del Yukón), el equipo de El Hombre y la Tierra aterriza en un pequeño aeropuerto del Parque Nacional Nahanni y emprende la ascensión del salvaje río South Nahanni (de 540 km de longitud, que es afluente del río Liard, que a su vez nutre al McEnzie que desemboca en el Océano Glacial Ártico), con el objetivo de llegar hasta las impresionantes Cataratas Virginia (con 96 metros de altura, aproximadamente el doble que las Cataratas del Niágara), viajando 250 km en tres etapas, desde un punto establecido, a bordo de varias lanchas de aluminio, muy rápidas, que les impulsan a 80 km/h río arriba, gracias a sus motores a reacción Berkeley capaces de alcanzar tal velocidad contra corriente.


Forma parte de la bellísima sección norte de la taiga canadiense, una zona que en gran medida no ha sido invadida por el hombre, ya que el Parque Nacional Nahanni, de 476.560 hectáreas de extensión, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1978 - un año antes de la llegada de Félix- se halla ubicado en la zona virginal de los Territorios del Noroeste del Canadá y sólo puede ser explorado por vía aérea o acuática, puesto que no hay ninguna ruta o carretera terrestre que le comunique con Fort Simpson.


Es un área con abundante variedad orográfica: cadenas montañosas, colinas onduladas, altas mesetas, valles pronunciados, cañones de entre 460 y 1200 metros de profundidad y un intrincado laberinto de grutas en sus cordilleras.
Las temperaturas oscilan entre extremos de 0º C a 27º C en Julio y Agosto y -50º C durante los meses de invierno.


Vemos una vegetación en la que abundan los abetos y abedules, así como un dédalo de ríos y meandros que circundan la cuenca del Nahanni, a todo lo cual se añade una rica fauna -formada por más de 40 especies de mamíferos y más de 180 especies de aves- en la que destacan águilas reales, alces que se alimentan de plantas subacuáticas (uno de los cuales es fotografiado por Félix), castores, cisnes trompeteros, gigantescos ciervos uapitís del tamaño de un caballo, etc, sin olvidar las especies que habitan su bosque boreal como caribús, osos negros, osos grizzlies, lobos, linces, etc, y las que evolucionan por las altas cumbres de sus montañas circundantes como muflones de Dall, cabras de las Montañas Rocosas, etc.

Por otra parte, las aguas del río Nahanni contienen 16 especies de peces.


Las condiciones de filmación son muy duras, ya que las lanchas avanzan a toda velocidad y Félix, Teodoro Roa y Alberto Mariano luchan al máximo por rodar todos y cada uno de los paisajes y fauna que les rodean a ambos lados de las embarcaciones durante su travesís del río Nahanni, por lo que, buscando la máxima estabilidad posible, instalan un enorme trípode sobre la cubierta de una de las lanchas, situando sobre él una cámara Arri de 35 mm, mientras desde otra de las lanchas se rueda a pulso con otra cámara Arri de paso universal. Los naturalistas Carlos Llandres y Patrick Lowsey, que forman también parte de este equipo de El Hombre y la Tierra, realizan también una encomiable labor.


Félix Rodríguez de la Fuente está extasiado ante la contemplación de tanta belleza, y se prodiga con fruición en la explicación de todo lujo de detalles y datos sobre lo que estamos viendo. Este hombre es una computadora viviente, con una memoria prodigiosa y unos muy profundos conocimientos zoológicos y de biología, y vive cada segundo con la máxima pasión e intensidad, que sabe transmitir como nadie al espectador.


Canadá fascina a Félix.


De repente, tras varios días de navegación río arriba, llegan a la muy peligrosa zona de aguas rápidas del río Nahanni, en los cañones, un área de máximo riesgo debido a la presencia de rápidos con rocas, donde los antiguos pioneros se veían obligados a remolcar las canoas desde la orilla.

El Nahanni, un río de aguas bravas de singular historia geológica, talló cuatro profundos cañones en la roca, manteniendo su excéntrico curso.

Pero Félix va acompañado de muy expertos pilotos canadienses de lancha, cuyo gran conocimiento del Nahanni les permite dirigir las embarcaciones sin que toquen ni los afloramientos rocosos ni los bajíos de cantos rodados.

Finalmente, después de tres días de viaje fluvial contracorriente a través del río Nahanni, llegan a las Cataratas Virginia, cuyo fragor inunda las naves.



El espectáculo es grandioso. Teodoro Roa y Alberto Mariano nos deleitan con imágenes y planos desde todas direcciones, revelándonos audiovisualmente la fuerza de la Naturaleza en una de sus máximas expresiones.

La potencia y energía del inmenso torrente de agua de las Cataratas Virginia son sobrecogedoras, así como el cejo que cubre un significativo porcentaje de la zona.


El Maestro se halla embebido de emoción y alucinado. Las lanchas se mueven muy cerca del gran salto de agua, una y otra vez, mientras Teodoro y Mariano filman este prodigio de la Naturaleza y tesoro del Canadá.


Súbitamente, llega la apoteosis: Teodoro Roa comienza a mover con maestría el zoom y realiza inolvidables planos del agua de las Cataratas Virginia cayendo en tromba y enmarcadas por bruma (en medio del ensordecedor estruendo grabado por Manuel Peña con su magnetófono Hi-Fi monofónico Nagra 4.2), y a los pocos segundos hay alternancia de la imagen del agua de la catarata con la superficie turbulenta de las aguas del río Nahanni, concluyendo el capítulo con ulteriores primeros planos de las aguas de las Cataratas Virginia mientras suena una bella música de fondo.



b) La Gruta Valeria: Félix Rodríguez de la Fuente resuelve el Misterio del Cementerio Helado con 116 esqueletos de muflones de Dall.- En 1979, durante la estancia del equipo de El Hombre y la Tierra en el Parque Nacional Nahanni, Félix Rodríguez de la Fuente llevó a cabo una de las empresas más arriesgadas y difíciles de su vida: la exhaustiva exploración interna de la Gruta Valeria, una enorme cueva ubicada dentro de la pared norte del Primer Cañón del río Nahanni, de muy difícil acceso, cuya entrada se halla en un escarpado farallón de 300 metros de altura, donde durante años anteriores se habían encontrado los esqueletos de 116 muflones de Dall que habían muerto por causas desconocidas en el interior de la cueva, y que tenían una antigüedad de 2500 años.

Tanto la Gruta Valeria como la Gran Sala donde se hallaban los 116 esqueletos de muflones de Dall muertos hacía 2500 años, había sido descubierta a finales de los años sesenta por Jean Poirel, explorador y paracaidista canadiense, nacido en Francia y residente en Montreal, que durante cuatro expediciones a la zona del Parque Nacional del Nahanni entre en 1964, 1970, 1972 y 1974 halló 250 cavernas, de las cuales la más importante era la Gruta Valeria, descubierta en 1972 y a la que dió el nombre de su hija, realizando además varios importantes mapas cartográficos, medición de la longitud de muchas cuevas con instrumentos de alta precisión, grabación de reportajes con cámaras cinematográficas de 16 mm y anotaciones topográficas que abrieron el camino para la consolidación del Parque Nacional Nahanni, cuyo principal promotor fue el Primer Ministro Canadiense Pierre Trudeau, que visitó la zona con Jean Poirel en 1972.

Pero el misterio que envolvía la muerte de los 116 muflones de Dall hace 2.500 años seguía sin poder resolverse, debido a que las bajísimas temperaturas en Invierno, Otoño y buena parte de la Primavera, sólo permitían el acceso con garantías de seguridad a la cueva durante los meses de Julio y Agosto, aunque siempre con una temperatura en el interior de la gruta de -15º C que provocaba rápidas hipotermias, además de que su suelo era muy resbaladizo y constante el riesgo de caídas y accidentes, por lo que únicamente se habían podido marcar y fechar los esqueletos mediante la técnica del carbono 14, con la mayor rapidez posible.

Ni que decir tiene que las muy peligrosas condiciones de estancia en el interior de la cueva, totalmente a oscuras, con abundantes pasillos muy estrechos de no más de un metro de altura, hacían virtualmente imposible el transporte de cámaras y objetivos cinematográficos y sobre todo de potentes y muy pesados equipos de iluminación que permitieran alumbrar debidamente las profundidades de la cueva, en especial la Gran Sala de la Gruta Valeria donde se hallaban los restos de los 116 muflones de Dall que habían penetrado en la cueva en diferentes momentos y grupos, hace aproximadamente 2.500 años y constituían el Cementerio Helado.

Durante los años setenta, habían circulado todo tipo de hipótesis en Canadá sobre cual había sido el motivo de la muerte de tantos muflones de Dall, una auténtica masacre que había acabado con la vida de nada menos que 116 de ellos.

Todo eran conjeturas y el misterio seguía indemne, sin que nadie pudiera demostrar científicamente y con pruebas irrefutables qué había sido en realidad lo que mató a tantos muflones de Dahl 2500 años antes.


Félix Rodríguez de la Fuente había tenido acceso a todos los informes obtenidos durante los años precedentes tanto por Jean Poirel como por científicos canadienses sobre la Gruta Valeria, incluyendo la perfecta numeración y datación de todos y cada uno de los 116 esqueletos de muflones de Dall así como un completo dossier fotográfico en blanco y negro, y en Junio de 1979, una vez en el Parque Nacional de Nahanni con el equipo de El Hombre y la Tierra, y tras haber explorado 250 km del río Nahanni contracorriente en lanchas rápidas y haber llegado hasta las Cataratas Virginia, decidió afrontar la investigación científica de la Gruta Valeria y tratar de encontrar una respuesta a un enigma cuyas claves llevaban más de diez años sin poder ser descifradas.
 
Así pues, el equipo de El Hombre y la Tierra se dispuso a tratar de realizar una proeza: el traslado de casi una tonelada de equipo de iluminación (10 cuarzos de 800 watios, pinzas, trípodes, lámparas, 100 metros cuadrados de cable, dos cuarzos de 650 autónomos, tres baterías para los cuarzos de 650, cuatro lámparas frontales, tres cargadores, 15 baterías de 12 voltios y de 60 amperios, un botiquín muy completo, etc) que procedente de Vancouver en avión de línea había llegado a Fort Simpson y que desde allí había sido llevado en tres vuelos hasta el campamento de El Hombre y la Tierra en Nahanni Park por un pequeño hidroavión impulsado por motor radial a pistón, mientras el traslado de toda la dotación para la instalación del campamento base y el combustible para el helicóptero fue realizado por tres embarcaciones fluviales con motor a reacción.

Una vez en el campamento base, los aproximadamente 1.000 kilos de material de iluminación precisaba ser transportado en helicóptero hasta las proximidades de la Gruta Valeria, ya que era imposible el aterrizaje de la aeronave en el escarpado farallón de 300 metros de altura (orientado al sur y que se yergue sobre el río Nahanni) en el que se halla la boca de la cueva, por lo que todo el material había de bajarse con mucha precisión y cuidado en varios viajes desde el helicóptero, mediante una gran red unida al aparato con un cable.

 
Esta arriesgada aventura comienza con el traslado mediante varios aviones pequeños de motor radial a pistón y varias lanchas fluviales de los 1.000 kilos de material de iluminación hasta un campamento que monta el equipo de El Hombre y la Tierra en una zona del Parque Nacional Nahanni ubicada a aproximadamente 10 minutos en helicóptero del acantilado en el que se halla la Gruta Valeria.

Fueron necesarios diez viajes en helicóptero desde dicho campamento hasta la gruta, llevando todos los elementos eléctricos y cinematográficos que se necesitaban para la filmación, ya que Félix y sus operadores de cámara sabían que para poder intentar resolver el enigma era necesario iluminar todo con la mayor potencia posible y también filmar y documentar con las dos cámaras cinematográficas Arri de 35 mm tanto las diferentes zonas de la cueva como todos y cada uno de los esqueletos de muflones de Dall, perfectamente conservados en la Gran Sala de la Gruta Valeria debido a las bajas temperaturas constantes desde hace miles de años y a que gran parte de la cueva está helada.

La contemplación del pequeño helicóptero volando cerca de los gigantescos farallones da una clara idea al espectador de las dificultades y riesgos de esta operación. Debido a la accidentada orografía del terreno, la aeronave no puede dejar a los integrantes del equipo de El Hombre y la Tierra en la boca de la gruta, sino que han de llegar a ella a través de una vereda, y una vez allí, el helicóptero descargará todo el material en un total de diez viajes.

Se filman las idas y venidas del helicóptero, cuyo experimentado piloto canadiense, con enorme precisión, se abre paso entre los muchos abetos próximos a la entrada de la caverna, sin tocarlos, evitando que la red que lleva el material se enganche en las ramas de ninguno de ellos y descargando suavemente todo el equipamiento sobre una pequeña plataforma que se abre junto a la boca de la Gruta Valeria.Espectaculares planos totalmente verticales de abajo a arriba filmados por Alberto Mariano en los que se aprecia el helicóptero y la red, muestran claramente los riesgos que asume Bruce, el piloto de la aeronave, cuyos viajes desde el campamento base hasta las proximidades de la entrada de la Gruta Valeria duran entre 10 minutos y un cuarto de hora.

 
Vemos como con frecuencia las aspas del helicóptero pasan muy cerca de las paredes de roca del imponente farallón.

Pero todavía queda lo más difícil: el transporte de todo ese material (aproximadamente una tonelada de peso) a lo largo de 800 metros de la caverna (cuya longitud total es de casi 2 km) hasta llegar a la Gran Sala de la Gruta Valeria, en la que se hallan los esqueletos congelados de 116 muflones de Dall.

Se comprueba todo, en especial las 15 grandes baterías de camión (30 kg de peso cada una) que han de hacer posible la iluminación de la caverna, cuyas muy bajas temperaturas internas reducen considerablemente la duración de cualquier fuente lumínica artificial.

Todos los componentes del equipo de El Hombre y la Tierra conocen los riesgos de entrar en la gruta en estas condiciones, ya que todo el equipo ha de ser llevado manualmente cargando con él sobre los hombros en condiciones muy duras a través de una pléyade de túneles y pasillos muy estrechos, con un enorme frío, sobre terreno resbaladizo y la hipotermia acechando en todo instante.

Existe también el peligro de que alguno de los componentes del equipo se pierda o quede aislado por algún motivo en el interior de la cueva, por lo que se decide montar tres campamentos entre la boca de la misma y la Gran Sala Valeria.

Todos conocen las dificultades de la operación, pero confían a muerte en Félix y entran con él en la gruta: Alberto Mariano, Teodoro Roa, Manuel Peña, Rafael Onieva, Carlos Llandres, Patrick Lowsley, etc y el resto del equipo de El Hombre y la Tierra penetran en la helada Gruta Valeria.

La cara de Félix Rodríguez de la Fuente refleja una enorme preocupación. Es quizá la aventura más difícil de toda su vida y trata de reducir al máximo los riesgos para sus colaboradores. Félix es el primero en avanzar, ayudado por varios de sus colaboradores que atan a la armadura de su mochila una de las pesadas baterías de camión de 30 kg de peso, y cargado con ella sobre su espalda, comienza a caminar lentamente a través de la Gruta.

Las imágenes no dejan lugar a dudas sobre las condiciones de extrema dureza de este acarreo para un hombre que pese a sus 51 años posee todavía una enorme potencia física y un amor propio sin igual. Su ejemplo sirve de estímulo a todos los demás, que cargan más baterías de camión y otro diferente equipo y avanzan tras Félix, lentamente.

Cada metro parece una eternidad. Las más veces hay que avanzar a golpe de riñón. A los pocos minutos, la mayoría están al límite de sus fuerzas. El frío ha comenzado a hacer mella, pero aunque cada vez más lentamente, siguen avanzando, manteniéndose lo más cerca posible unos de otros, iluminando la zona justo delante de ellos con linternas individuales que llevan adosadas a sus cascos así como potentes reflectores portátiles que llevan en una mano.

Saben que han de hacer las cosas con la mayor rapidez posible, ya que si se quedan sin energía para iluminar la Gran Sala Valeria, no podrán filmar los esqueletos de los 116 mucflones de Dall y los alrededores para intentar resolver el misterio de su muerte.

Tras mucho sufrimiento y avanzar a través de los mismos pasillos que atravesaron los muflones de Dall 2.500 años antes, consiguen alcanzar la Gran Sala de la Gruta Valeria y llega el gran momento, cuando Alberto Mariano enchufa todas las baterías iluminando completamente el lugar. 


Súbitamente, se dan cuenta de que los esfuerzos y riesgos han merecido la pena: ante sus ojos aparece el esqueleto de un joven macho de muflón de Dall, semienterrado en el hielo y perfectamente conservado gracias a las muy bajas temperaturas. El suelo, absolutamente helado, lo aprisiona. 
 

El techo de esta sala es una gran filigrana de hielo, y Teodoro Roa se deleita en ella. Es hielo fósil, con tonalidad azul, que seguramente no ha cambiado en los últimos 100.000 ó 200.000 años. La emoción es indescriptible. Hay tomas panorámicas del lugar así como primerísimos planos de zonas concretas. 
 
A pocos metros del vestíbulo está el depósito de esqueletos, en cuya entrada hay machos jóvenes y hembras, mientras que al fondo hay mayormente adultos.
 
Detalladamente, iluminan y filman todos y cada uno de los esqueletos. Son momentos muy dramáticos. Se trata de un auténtico cementerio helado de muflones de Dall. Frecuentemente, los muflones de Dall se adentran en los laberintos de cuevas del Parque Nacional de Nahanni, sobre todo en Invierno, buscando el calor y lamer las sales minerales que contienen las paredes de estas grutas, saliendo de nuevo al exterior cuando las circunstancias son favorables.

Luego entonces, ¿Qué pudo ocurrir? ¿Qué fue lo que mató a una cantidad tan grande de estos animales? ¿Por qué la inmensa mayoría de ellos murieron tan próximos los unos a los otros en la Gran Sala? ¿Qué hizo que ni uno sólo de ellos pudiera escapar tras su entrada en la Gruta Valeria? 
 

Vemos un gran macho con su cornamenta prácticamente intacta, así como muchos otros esqueletos y multitud de despojos muy bien conservados de muflones de Dall, que murieron en las más diversas posiciones y distribuidos por esta gran cripta.
 
La tensión se hace insoportable. El rostro de los componentes del equipo refleja claramente el shock provocado por todo lo que están viendo y para lo que no pueden encontrar una explicación.

Pocos segundos después, se produce el desenlace; la cámara está filmando a Félix Rodríguez de la Fuente que se halla examinando la zona del Cementerio Helado y sus alrededores, cuando inesperadamente su expresión facial cambia totalmente y está muy visiblemente afectado por algo.

 

Félix Rodríguez de la Fuente, con su atávico olfato, experiencia y capacidad de lectura de terrenos naturales que siempre le caracterizó, acaba de darse cuenta de lo que ocurrió en realidad, siendo el primer ser humano en resolver el misterio de la muerte de los muflones de Dahl de la Gruta Valeria, la terrible realidad de lo que sucedió, que comienza a explicar con detalle.

De repente, hay un primer plano escalofriante de una hembra de muflón de Dall junto a su pequeño, muerto en postura muy convulsa y agónica. La madre luchó hasta los últimos instantes intentando escapar y salvar la vida de su cría. Este es sin duda uno de los momentos más dramáticos en la historia de El Hombre y la Tierra.



UNA FUERZA DE LA NATURALEZA


Un muy joven Félix Rodríguez de la Fuente el día que batió el récord de 400 metros lisos durante los Campeonatos Universitarios celebrados en Valladolid en 1946, con tan sólo 18 años de edad. Podemos observar su asombrosa fuerza física natural, su enorme anchura de hombros y su poderosa musculatura.

Desde su infancia, Félix Rodríguez de la Fuente pasó muchas horas en el campo, intentando siempre ver a sus queridos animales desde las distancias más cortas posibles, por lo que estaba acostumbrado a hacer muchos kilómetros tanto caminando como corriendo campo a través

Ello le convirtió con el paso de los años en un formidable atleta natural que aunaba gran fuerza y potencia física con grandes cantidades de energía, resistencia a la fatiga e increíble perseverancia en todo lo que hacía, hasta tal punto de que la mayoría de veces sus colaboradores encontraban difícil seguir su ritmo de trabajo.

El Dr Félix Rodríguez de la Fuente parecía no cansarse nunca y asumía siempre los mayores riesgos cuando el equipo tenía que filmar especies peligrosas, tal y como fue evidente durante el rodaje de los capítulos de El Hombre y la Tierra realizados en Venezuela, en los que él es el hombre que agarra el cuello de todas las enormes anacondas que aparecen en imagen, para evitar riesgos a sus colaboradores.

Félix Rodríguez de la Fuente en Kenya hablando con otros dos naturalistas. La tremenda fuerza física de Félix Rodríguez de la Fuente es muy visible en esta imagen si comparamos por ejemplo la anchura de sus brazos y piernas con los otros dos hombres que aparecen junto a él.



UN RECUERDO IMPERECEDERO








INSTITUCIONES Y PERSONAS IMPORTANTES EN LA PRESERVACIÓN DEL LEGADO DE FÉLIX RODRÍGUEZ DE LA FUENTE

- Fundación Félix Rodríguez de la Fuente.- Creada en 2004 por la familia del naturalista y zoólogo de talla mundial, con el objetivo de salvaguardar, proteger y promocionar su vida, obras y legado para la Humanidad, mediante el desarrollo de nuevos proyectos que fomenten la armonía entre el Hombre y la Tierra.

Es una fundación privada e independiente.

- Marcelle Genevieve Parmentier.- Presidenta de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente y viuda del mundialmente célebre naturalista español.


Mujer que merece los mayores elogios y apoyo, ya que sufrió mucho con la prematura muerte de su esposo, y desde 1980, año del fallecimiento de Félix, ha soportado el paso del tiempo con encomiable discreción y elegancia, esperando muchos años hasta encontrar el mejor momento para la génesis de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente. Fue el gran apoyo de Félix hasta su muerte, y le ayudó a criar muchos cachorros de lobo y crías de aves de presa en sus años iniciales como naturalista tras dejar su trabajo como odontólogo.

- Odile Rodríguez de la Fuente.- Directora General de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente, así como Vicepresidenta de la misma.

Miembro de la Junta Rectora de WWF España.

Es una de las tres hijas de Félix Rodríguez de la Fuente, con el cual guarda un gran parecido físico y pasión por la naturaleza y la vida salvaje.

Figura clave en la preservación del recuerdo y obra de Félix Rodríguez de la Fuente, así como de la divulgación de su obra y legado científico, medioambiental y social.

Licenciada en Ciencias Biológicas y en Producción de Cine y TV por la Universidad de Los Angeles (California), habiéndose especializado además en medios audiovisuales en el Departamento de Televisión de National Geographic, en Washington D.C, donde estuvo durante cuatro años y medio.

Gran amante de la agricultura y del concepto de la tierra como ente vivo.

- Alvaro Will.- Director General de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente. Abogado especializado en Relaciones y Leyes Internacionales, Tecnologías de la Información y Cooperación para el Desarrollo, además de abundante know-how en TIC y Sector Terciario.

- Antón García Abril.- Gran compositor y creador de la mítica música de la serie El Hombre y la Tierra, probablemente la más impresionante y sobrecogedora partitura jamás creada en el mundo para películas documentales sobre vida salvaje y naturaleza.

Una de las figuras clave en la vida de Félix Rodríguez de la Fuente. Ambos fueron grandes amigos e iban a comer con frecuencia a la zona del Madrid de los Austrias.

Antón García Abril estuvo presente el día de la primera proyección en pantalla en sala cinematográfica acondicionada de la famosa escena de uno de los capítulos de la serie El Hombre y la Tierra en la que un águila real captura un recental de cabra montesa en lo alto de un gran acantilado y lo lleva volando muchos cientos de metros hasta su nido. El Maestro García Abril vió llorar a Félix Rodríguez de la Fuente mientras éste veía la secuencia completa con proyección óptica de altísima calidad y gran tamaño de imagen realizada con la bobina original de emulsión química en color Kodak de 35 mm.

Hoy en día, treinta años después de la muerte del inolvidable Félix Rodríguez de la Fuente, el legendario tema musical de Antón García Abril con el que comienza cada capítulo de El Hombre y La Tierra sigue provocando elevadas dosis de fascinación e intensidad emocional en las personas que tienen ocasión de ver cada entrega de esta serie Patrimonio de la Humanidad (sobre todo mediante un reproductor DVD o Blu-ray compatible upscaling, una experiencia audiovisual absolutamente alucinante, de lo cual damos fe) rodada nada menos que en 35 mm con parámetros cualitativos más propios de David O´Selznick.

- Miguel Molina.- Operador de cámara cinematográfica perteneciente al equipo de El Hombre y la Tierra y superviviente de la jornada en la que se produjo el accidente aéreo de Alaska el 14 de Marzo de 1980 en el que murieron en el acto el piloto norteamericano Warren Dodson, Félix Rodríguez de la Fuente, el operador de cámara Teodoro Roa (por entonces uno de los mejores especialistas del mundo en filmación de animales salvajes) y el ayudante de operador de cámara Alberto Mariano Huéscar.

Miguel Molina y el Dr Félix Rodríguez de la Fuente habían llegado a Alaska el día 11 de Marzo, mientras que Teodoro Roa y Alberto Mariano Huéscar se hallaban allí desde el 28 de Febrero de 2010, rodando la carrera de trineos Iditarod.

El 13 de Marzo de 1980, Félix Rodríguez de la Fuente, Teodoro Roa, Alberto Mariano Huéscar, Miguel Molina y los pilotos de los aviones cenaron todos juntos en el pueblo de Unalakleet, al oeste de Alaska.

Tony Oney, uno de los pilotos, le comentó a Miguel Molina que tenía un retén del cigüeñal del motor que perdía aceite, que había tenido que andar reponiéndolo y que ya no le quedaba más.

Al día siguiente, 14 de Marzo de 1980, era el cumpleaños de Félix Rodríguez de la Fuente y el equipo se dispuso a viajar en dos aviones.

En el primero despegaron el piloto Warren Dodson (adelante a la izquierda), Félix Rodríguez de la Fuente (que iba a la derecha del piloto), Teodoro Roa (atrás a la izquierda) y Alberto Mariano Huéscar (atrás a la derecha).

En segundo lugar partió una avioneta de Eskimo TV, también de color naranja, y en tercer lugar despegó el avión tripulado por el piloto Tony Oney y a su derecha Miguel Molina, que pocos minutos después del despegue, unos 300 metros a su derecha, vieron caer cerca del poblado esquimal de Shaktoolik, a 25 km del Mar de Bering, el aparato en el que iban Félix Rodríguez de la Fuente, Teodoro Roa, Alberto Mariano Huéscar y el piloto Warren Dodson, tras haber perdido la aeronave estabilidad debido al desprendimiento de uno de los hidropatines del aparato.

Durante los 30 años transcurridos desde entonces, Miguel Molina ha permanecido en un discreto y elegante segundo plano, pese a que fue una de las personas que compartió con Félix Rodríguez de la Fuente sus últimas horas de vida.

- Angela Minaya.- Secretaria de Dirección de El Hombre y la Tierra. Mujer con gran capacidad de trabajo, fuerza mental y precisión en todo lo que hacía. El Dr Félix Rodríguez de la Fuente confiaba totalmente en ella.

Viajó con el equipo que rodó los 18 capítulos de Venezuela y estaba muy cerca de Félix Rodríguez de la Fuente cuando la enorme anaconda estuvo a punto de matarle de un mordisco en la cabeza.

Quedó muy impresionada al ver las tribus remotas de la jungla venezolana, y todavía recuerda el tremendo ritmo de trabajo de Félix, así como su asombrosa capacidad para generar constantemente nuevas ideas.

Angela Minaya fue una figura clave en el enorme éxito internacional de El Hombre y La Tierra por todo el mundo ( fue emitida en 30 países e incluso llegó a alcanzar el número 1 de Estados Unidos en las listas de audiencia de programas televisivos documentales sobre naturaleza y fauna) y ha permanecido en un discreto papel durante los treinta años transcurridos desde la muerte de El Maestro.

También realizó una importante labor durante los muchos meses que el equipo de El Hombre y la Tierra estuvo en la zona de Pelegrina, Guadalajara (criando a un grupo de lobeznos que habían sido hallados en el interior de una lobera, hasta que se hicieron adultos), en un campamento ubicado en la Vallejada del Río Dulce, mecanografiando con gran velocidad, precisión y sin faltas de ortografía todo lo que Félix le decía con máquina de escribir Olivetti Lettera 32, así como anotando gran cantidad de datos de todo tipo.

Probablemente muchas cosas importantes no habrían sido posibles (especialmente en momentos en que los miembros del equipo estaban al borde del agotamiento debido a la energía sin límites de Félix y al duro ritmo de trabajo que marcaba) sin Angela Minaya, que soportaba la presión y transmitía fuerza al resto de miembros del equipo en los instantes más difíciles.

- Luis Miguel Domínguez Mencía.- Prestigioso naturalista y director de documentales sobre naturaleza y fauna. Fue uno de los colaboradores directos de Félix Rodríguez de la Fuente durante los años setenta.

Muy conocido por haber realizado para TVE series sobre naturaleza y animales, habiendo desarrollado también una importante labor en radio, dirigiendo programas como Al Cabo de la Calle, El Ciempiés, o Todos Somos Naturaleza.

Igualmente, ha participado con frecuencia en capítulos de la serie del canal televisivo Cuatro "Cuarto Milenio", dirigida por Iker Jiménez.

Su última producción es Tesoro del Sur, serie documental de cuatro capítulos sobre la fauna y flora de Andalucía así como su clima mediterráneo.

Ha sido también miembro de la Junta Directiva de entes como Adena/WWF, Greenpeace, Survival International y WATU, destacando como gran defensor de animales en peligro de extinción como el lobo ibérico.

Gran admirador de Félix Rodríguez de la Fuente y hombre que se siente totalmente identificado tanto con la filosofía vital de Félix como con su mensaje naturalista, ecológico y conservacionista.

Además, ha ganado muchos premios importantes relacionados con la naturaleza, la investigación y la ciencia: Premio Nacional de las Artes y Tradiciones Populares (1987); Premio a la mejor serie de TV científica (1994); Premio Julio Verne a la Mejor Serie Divulgativa (1994); Accésit de Honor del Premio Príncipe de Asturias para Jóvenes Investigadores (1978 y 1983); Premio de la Federación de Amigos de la Tierra (1988); Premio de Vida Saludable (2003), etc.

Entre los libros más importantes que ha escrito destacan: Guía de la fauna callejera; Caminando a través del Bajo Río Manzanares; Nuestra Tierra, Nuestra Vida; ¿Quieres ser naturalista?

Y entre sus series televisivas cabe citar: Vietnam, Vida después de la Muerte; Amazonia, Ultima Llamada; Espacios Naturales; Vive el Camino; Descubre tus Cañadas; Tesoros del Sur; Yendo al Campo sin Comida; El Naturalista en Casa; El Show de los Records; La Vista de Anselmo; El Toro Amigo: naturalistas, etc.

Fue también creador en 2001 del Exotarium, único centro existente en España dedicado al alojamiento y cuidado de animales exóticos, que daba cobijo a unas 500 especies diferentes de animales, y que existió hasta 2009.

- Juan Carlos del Olmo.- Prestigioso naturalista, Secretario General de WWF España, cargo que ostenta desde 1996.

Otro gran admirador de Félix Rodríguez de la Fuente, que ejerció una enorme influencia en su vida, al igual que ocurre con sus millones de entusiastas, distribuídos por toda la geografía mundial.

Es un experto anillador de aves y ha colaborado desde su juventud con muchas organizaciones conservacionistas, habiendo realizado también abundantes documentales sobre naturaleza y fauna para TVE.

Es uno de los principales artífices de la Coalición Climática compuesta por 30 organizaciones pertenecientes a diversos ámbitos que piden un acuerdo básico independiente de los partidos políticos en el poder para construir un modo común de luchar contra el calentamiento global que amenaza nuestro planeta.

Es también una autoridad internacional sobre el efecto de la deforestación debida al cultivo incontrolado de soja, afirmando que si no comienzan a perfilarse mecanismos que frenen esta tendencia, estableciendo criterios que decidan las zonas en las que puede o no cultivarse este producto, llegará un momento en el que no habrá ni un sólo árbol en la Amazonia, el Chaco ni en el resto de Sudamérica, sin olvidar su preocupación sobre los inicialmente prometedores biocarburantes, que a la postre se han convertido con frecuencia en un gran problema medioambiental, ya que la prioridad más importante ha de ser garantizar el origen sostenible de las materias primas.

Juan Carlos del Olmo acompañó a Marcelle Geneveve Parmentier y a Odile Rodríguez de la Fuente durante la histórica y muy emotiva audiencia concedida por Su Majestad El Rey en el Palacio de la Zarzuela el 31 de marzo de 2005 con motivo del vigésimo quinto aniversario de la muerte de Félix Rodríguez de la Fuente y la recien creada Fundación que lleva su nombre y cuya misión es contribuir al desarrollo de la divulgación y difusión de las ciencias de la vida y el respeto al medio ambiente

- Benigno Varillas.- Escritor profesional, periodista y autor de la excelente Biografía Autorizada de Félix Rodríguez de la Fuente, un colosal libro de 761 páginas que incluye una enorme cantidad de datos, detalles y anécdotas de todo tipo relacionadas con la vida del gran naturalista español y creador de documentales sobre animales. Han sido necesarios muchos años de investigación y amor por el legado de Félix para el lanzamiento de esta obra indispensable.

Durante casi treinta años transcurridos desde la muerte de Félix Rodríguez de la Fuente en 1980, Geneveve Parmenter, esperó pacientemente y con gran criterio hasta que las circunstancias permiteron la creación de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente, guardando también con gran previsión de futuro más de 2.000 documentos originales y cartas de Félix, así como 400 grabaciones hechas por Félix con su voz y emitidas por Radio Nacional de España durante la segunda mitad de los años sesenta y la primera mitad de los setenta y muchas cintas de conferencias, ruedas de prensa y entrevistas, un inmenso legado en gran medida desconocido por el público y cuyo acceso fue facilitado al autor por Odile Rodríguez de la Fuente, hija de Félix y figura clave en la difusión y conocimiento del pensamiento y obra del gran naturalista y conservacionista español de fama mundial.

El libro Félix Rodríguez de la Fuente: Su Vida, Mensaje de Futuro, lanzado al mercado en Abril de 2010 y que ha desvelado una ingente cantidad de informaciones y datos desconocidos hasta ahora, ha marcado un antes y un después en el conocimiento que se tenía sobre su figura, filosofía vital, proyectos de futuro, revolucionarias ideas medioambientales, enorme acervo científico y cultural, e incluso la visión pionera de internet y la sociedad global del conocimiento así como la concepción global del cosmos y de como enfocar el futuro de la especie humana, que tenía este hombre extraordinario que fue Félix Rodríguez de la Fuente.

Fue creador de la sección de periodismo ambiental del diario El País, en el que trabajó entre los años 1973 y 1978.

Fundador y Director de la revista Quercus (la publicación decana en España sobre observación, defensa y estudio de la Naturaleza) entre 1981 y 2001.

Editó las memorias de José Antonio Valverde ( eminente biólogo y naturalista que fue una de las fuentes de inspiración y amigo personal de Félix Rodríguez de la Fuente) entre 2003 y 2006.

Columnista del suplemento dominical del diario El Mundo en 1995.

Fundador de la Asociación de Amigos de la Naturaleza en 1972 y de Greenpeace España en 1984.

Premio Nacional de Medio Ambiente en 1989.

- Joaquín Araujo.- Prestigioso naturalista que fue colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente durante sus últimos seis años de vida entre 1975 y 1980.


Es Comisario de la Exposición Itinerante Félix Rodríguez de la Fuente que desde Octubre de 2005 recoge documentos audiovisuales sobre la obra del naturalista español de fama mundial muerto en 1980.

Ha escrito más de 150 libros sobre naturaleza, parques nacionales, bosques mediterráneos, diferentes especies de animales, el agua como ingrediente básico de la vida, el mundo y cultura rurales, los Pirineos, ecología, Lanzarote, el Valle de La Rioja, espacios naturales de Extremadura, el águila real, especies protegidas, el mundo del jaguar, cómo hablar a los niños sobre la naturaleza y el medio ambiente, etc.

Es uno de los más importantes expertos en Fauna y Naturaleza de España, habiendo recibido durante su trayectoria profesional gran cantidad de premios y galardones, entre los que cabe citar:

- Premio Vida Sana al mejor artículo sobre agricultura biológica (1983).

- Premio Especial del V Certamen Internacional de Cine de Madrid 1984 al mejor guión por los programas "El Encinar y la Dehesa" de la serie El Arca de Noé.

- Premio del Festival de Cine de Riga (Letonia) 1984 por la serie El Arca de Noé.

- Premio Global 500 de labor divulgativa en favor del medio ambiente de las Naciones Unidas 1991, que le fue entregado por el Rey de Suecia el 5 de Junio de dicho año. Este es un galardón muy importante, que fue recibido con anterioridad entre otros por David Attenborough y Jacques Cousteau.

- Premio de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid 1993, a la mejor labor de prensa como editor del Suplemento Biosfera de Diario 16.

- Premio Adenex 1995 a su labor como creador de la Reserva Biológica Vento en Extremadura.

-Finalista del Premio Espasa Calpe de Ensayo por su libro "XXI: Siglo de la Ecología".

- Premio Nacional de Medio Ambiente Medios de Comunicación 1997.

- Premio año 2000 como reconocimiento a la mejor serie de televisión española en toda su historia a El Hombre y la Tierra, cuyo alma máter fue Félix Rodríguez de la Fuente, y que Joaquín Araujo culminó tras su muerte en 1980, escribiendo los ulteriores textos y guiones.

- Premio del Congreso Nacional de Medio Ambiente 2000 por su trayectoria en los medios de comunicación.

- Nominación al Oscar de Hollywood 2003 y a los Premios Goya de dicho año como director del equipo español en la película "Nómadas del Viento" de Jacques Perrin (2002).

- Premio Ondas 2003 como miembro del programa de Pepa Fernández.

- Premio de la Fundación BBVA por su labor difusora de los valores de la biodiversidad (2006).

Es además autor de una importante biografía sobre Félix Rodríguez de la Fuente, escrita en 1990: "La Voz de la Naturaleza" : Biografía de Félix Rodríguez de la Fuente ". Editorial Salvat.

- Miguel Pou Vázquez.- Presidente de la ONG Proyecto Félix y de la Federación de Asociaciones de Félix Rodríguez de la Fuente. Zoólogo y naturalista que ha ganado muchos galardones, entre ellos el Premio de la Fundación Mundial para la Vida Salvaje (1983), el Segundo Premio Príncipe de Asturias para Jóvenes Investigadores (1984), el Segundo Premio Holanda de Phillips (1986) con una gran investigación de 2.200 páginas que tuvo como resultado la creación de las Reservas Naturales del Delta del Río Llobregat, etc.

Es también Profesor de Comunicación y escritor. Lleva muchos años trabajando en un sueño hecho realidad: el desarrollo de la mayor base de datos del mundo sobre Félix Rodríguez de la Fuente.


Ha escrito tres grandes libros sobre Félix Rodríguez de la Fuente, titulados Félix Rodríguez de la Fuente: El Hombre y su Vida, Félix, El Amigo de los Animales (revisión mejorada y ampliación de la obra anterior) y La Maravillosa Infancia de Félix Rodríguez de la Fuente.

Su blog personal sobre Félix Rodríguez de la Fuente constituye un caudal informativo a tener en cuenta para todos aquellos interesados en profundizar en el conocimiento de la gran obra y legado del gran naturalista español de fama mundial.

Ha dedicado 33 años de su vida al estudio de la figura de Félix, del cual es un destacado experto.

Gran promotor de la revista Acción Naturaleza, una publicación dedicada a Félix Rodríguez de la Fuente y de la cual se han publicado ya 23 números.

Ha escrito también un libro importante: La Conciencia Planetaria de Félix Rodríguez de la Fuente: Propuestas de un Genio a la Sociedad.Ha desarrollado también una encomiable labor como impulsor de los Encuentros de Interesados en Félix Rodríguez de la Fuente.

Con motivo del 30º Aniversario de la Muerte de Félix Rodríguez de la Fuente, Miguel Pou fue invitado por el programa radiofónico de divulgación científica Sonidos de la Tierra, donde habló sobre la infancia de Félix, su vida y su filosofía, así como el mensaje y legado que nos dejó tras su fallecimiento.

Miguel Pou Vázquez ha sido una persona importante en el mantenimiento de la llama viva de Félix Rodríguez de la Fuente durante los treinta años transcurridos desde su muerte, con una labor ininterrumpida de más de tres décadas en esta faceta, cuyo punto de inflexión tuvo lugar en 1977 cuando conoció en persona a El Maestro, que dejó en él una profunda huella.



- Miguel Delibes de Castro.- Eminente biólogo de talla internacional, hijo del mundialmente famoso escritor Miguel Delibes. Fue director de la Estación Biológica del Parque Nacional de Doñana durante doce años. Es a día de hoy la mayor autoridad en el mundo sobre el Lince Ibérico, uno de los más bellos animales de nuestro planeta.

En 1977 realizó una extraordinaria tesis doctoral sobre la ecología trófica de Lince Ibérico y ha desarrollado una extensa labor como miembro de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, trabajando en diferentes grupos de investigación en España, Argentina y México, siendo también asesor durante la Cumbre Medioambiental sobre la Diversidad celebrada en Río de Janeiro en 1992.

Es Presidente de la Sociedad Española para la Preservación y Estudio de Mamíferos, habiendo realizado una amplia gama de trabajos de campo y estudios científicos que aparecen en muchos libros y artículos escritos por él.

Es también Director de Ecología de Carnívoros de la estación Biológica de Doñana, donde estudia al Lince Ibérico en el marco de diferentes programas encaminados a la preservación de esta especie en peligro de extinción.

Inició su actividad profesional a finales de los años sesenta, colaborando con Félix Rodríguez de la Fuente como redactor de la Enciclopedia Salvat de la Fauna.

Tras muchos años de profundos estudios, Miguel Delibes de Castro demostró que el águila imperial ibérica es una especie independiente.

Carlos Sanz.- Prestigioso biólogo de campo, fotógrafo naturalista y documentalista. En 1975, siendo estudiante de Ciencias Biológicas, comenzó a colaborar con Félix Rodríguez de la Fuente en diferentes capítulos de El Hombre y la Tierra, ayudando a Félix a criar una camada de cinco lobeznos cuya madre había sido muerta a tiros en Villadiego (Burgos).


Durante el rodaje de los tres míticos capítulos sobre Rapaces Nocturnas Ibéricas de El Hombre y La Tierra, Carlos Sanz, ya por entonces gran amante de la fotografía, utilizó cámaras Yashica TL Electro-X (con ópticas fijas Yashinon-DX), y Nikon F2 Photomic con objetivo Nikkor- S.C Auto 50 mm f/1.4 para hacer fotos de búhos reales, búhos chicos, lechuzas, cárabos, autillos, mochuelos, sobre todo de sus brillantes ojos, de los enormes pabellones auriculares, de las garras afiladas y protegidas por las plumas, de las plumas rémiges aterciopeladas con el borde de ataque deflecado para no hacer ruido durante el vuelo, etc.

Igualmente, Carlos Sanz fue el colaborador de Félix encargado de usar el receptor Falconer RB-4 de onda corta que recibía las señales enviadas por cada diminuto emisor short wave que había sido previamente instalado en los duros cañones de las plumas rectrices o de la cola de cada especie de rapaz nocturna por Félix y y Aurelio Pérez para su ubicación y seguimiento hasta distancias de 8 km.

Gran apasionado del lobo, Carlos Sanz tuvo en Félix Rodríguez de la Fuente a un admirado maestro que fue clave en su decisión de dedicarse a la Biología y durante estos treinta años transcurridos desde la muerte de Félix, ha criado varias manadas de lobos, ha convivido con ellos y se ha integrado en las sus estructuras sociales como un miembro más.

Ha fotografiado las más diversas especies de la fauna ibérica: el linces, el águilas reales, el pájaro carpintero, el lirón careto, y muchos más, incluyendo la gineta, de la que es un gran especialista.

Asimismo, su labor como reconocido documentalista trabajando como asesor, guinista, biólogo y naturalista de campo ha incluído El Hombre y la Tierra, Naturaleza Ibérica, La Marisma y el Llano, De Polo a Polo, Enclave Verde, Madrid: Ritmo Salvaje, La Ruta Alternativa, Las Montañas del Lobo, La España Salvaje, etc.

Fue director y guionista de la serie televisiva Pacto con Lobos.

Creador del Núcleo Zoológico Carlos Sanz Lobo Producciones, en el que durante más de 10 años se filmaron escenas sobre la vida íntima del lobo ibérico, incluyendo el nacimiento de una camada de lobeznos en el interior de una lobera, todo ello complementado con imágenes sobre diversos aspectos socioculturales y medidas para la conservación de esta especie llevadas a cabo en España.

El 1 de Octubre de 2006 alcanzó el récord de audiencia televisiva de dicho año, con dos millones de telespectadores el primer día de emisión de los dos capítulos El Lobo Ibérico y su Mundo y Leyenda y Realidad del Lobo Ibérico.

Coautor junto con Julio García Robles del libro Amigo Lobo, publicado en 2001.
Ha sido también autor de excelentes reportajes fotográficos para las revistas Periplo, Natura, Ambienta, Biológica, etc.

Posee un gran archivo fotográfico sobre fauna, flora, paisajes y aspectos humanos de España y América.

Premio 2008 EDC Natura a la Conservación de la Naturaleza.

Premio Panda WWF/ADENA de Comunicación Ambiental 2008 a su exposición itinerante Amigo Lobo.

Tras la muerte de Félix Rodríguez de la Fuente en 1980, Carlos Sanz ha sido un naturalista de enorme importancia en la preservación de la especie del lobo ibérico así como en la difusión y conocimiento de esta especie.

- Carlos de Prada.- Naturalista, periodista y escritor. Gran experto en todo tipo de temas relacionados con Fauna y Naturaleza. Ha tomado parte muy activa en muchos programas dedicados a la vida salvaje, tanto radiofónicos como televisivos, habiendo escrito además muchos libros y guías de campo.


Gran admirador de Félix Rodríguez de la Fuente desde su infancia, es un habitual conferenciante sobre la figura de Félix en muchos debates y programas de radio y TV.

- Miguel Ledo.- Técnico Superior en Producciones Audiovisuales. Otro gran admirador de Félix Rodríguez de la Fuente. 

Ha trabajado para diferentes cadenas televisivas, pero descubrió su verdadera vocación gracias a la serie documental España en la Vereda junto con el periodista y naturalista Carlos de Prada.


Es también desde su infancia un gran amante de la naturaleza, la fauna y la flora salvaje. Ha disertado con frecuencia sobre la muy significativa importancia histórica de Félix Rodríguez de la Fuente en abundantes conferencias, programas y debates.

- Manuel Peña.- Experto técnico de sonido que realizó las grabaciones sonoras de la inmensa mayoría de capítulos de la serie El Hombre y la Tierra, tanto los rodados en España (Fauna Ibérica), como los filmados en Venezuela (Fauna Venezolana), Canadá (Fauna Canadiense) y Alaska.

Llevó a cabo uno de los mayores hitos en la historia de la captación de sonido ambiente para documentales de fauna y naturaleza cuando desde el interior de un hide situado a tres metros de altura y en compañía de Félix y un operador de cámara, registró con impresionante calidad mediante magnetófono profesional monofónico grabador a carrete abierto Nagra III NP y varios micrófonos instalados en diferentes zonas de un bosque, el sonido producido por diferentes aves rapaces nocturnas y roedores (las primeras permaneciendo estáticas para localizar a sus presas mediante el oído al ser prácticamente invisibles durante la noche y los segundos intentando alimentarse realizando el menor ruido y movimientos posibles para no ser detectados) durante los capítulos de El Hombre y La Tierra dedicados a la guerra acústica entre búhos reales, búhos chicos, cárabos, autillos, lechuzas, mochuelos, etc, y ratones, lirones caretos, conejos, etc, en medio de una oscuridad casi total.

Fue también uno de los pioneros en el uso de windshields para micrófonos, que reducían al máximo posible el ruido provocado por fuerte viento, lo cual le fue muy útil especialmente en sus registros sonoros de los capítulos rodados en el Parque Nacional Kluane, en el extremo suroccidental del Territorio del Yukón (Canadá).

- Antonio Torreblanca.- Experto técnico de sonido colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente en muchos capítulos de El Hombre y la Tierra, registrando ambientes naturales con el magnetófono profesional monofónico grabador a carrete abierto Nagra 4.2, obteniendo sonido hi-fi de altísima calidad.

Antonio Torreblanca tuvo entre otros un papel destacado en la excelente grabación de sonido ambiente de diferentes entornos naturales, así como de aullidos de lobos en los capítulos de la serie El Hombre y la Tierra dedicados a dichos cánidos salvajes, mediante magentófono profesional monofónico Hi-Fi a carrete abierto Nagra 4.2.

Fue también uno de los pioneros en el uso de windshields para micrófonos.

- Manuel Barroso.- Técnico de sonido colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente en muchos capítulos de El Hombre y la Tierra.

- Suso Garzón.- Prestigioso naturalista, amigo personal de Félix Rodríguez de la Fuente.

- José Luis Carredano.- Naturalista que fue uno de los estudiantes de Ciencias Biológicas que colaboró con Félix Rodríguez de la Fuente en la crianza de varios lobeznos que habían sido hallados en la zona de Pelegrina (Guadalajara). Su labor fue importante durante los meses que estuvieron alimentando a los pequeños lobos y haciendo todo tipo de mediciones y estadísticas sobre su evolución en el campamento de El Hombre y la Tierra ubicado en la Vallejada del Río Dulce.

- Continuadores de Félix Rodríguez de la Fuente.- Organización dedicada a potenciar de modo constante la memoria de El Amigo de los Animales, luchando por dar a conocer su obra y legado a nuevas generaciones de jóvenes interesados tanto en la preservación de la fauna como en el bienestar de la naturaleza.

Este destacado grupo de admiradores de Félix Rodríguez de la Fuente lleva 24 años recopilando información sobre El Maestro, pionero del Ecologismo Español, y han conseguido crear una espléndida publicación gráfica: La Revista de los Seguidores de Félix.

En la actualidad están desarrollando los Campamentos Félix Rodríguez de la Fuente, 30 km al sur de Ordesa, con la intención de difundir la concienciación ecológica en encuentros de seguidores de Félix tanto en España como en el extranjero.

Otro de sus objetivos es la creación de un Museo Dr Félix Rodríguez de la Fuente.

- Josechu Lalanda.- Gran colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente y su principal dibujante de animales. La enorme capacidad descriptiva de Félix permitía a Josechu Lalanda hacer impresionantes dibujos, algo que resultaba especialmente visible cuando representaba sobre papel el modo en que cazaban distintos depredadores.

- Joan Salvat.- Director General del Grupo Editorial Salvat durante finales de los sesenta y setenta, cuando el Dr Félix Rodríguez de la Fuente hizo la Enciclopedia Salvat de la Fauna Mundial.

- Rafael Onieva.- Foto fija, colaborador de Félix en muchos capítulos de El Hombre y la Tierra, utilizando una amplia gama de equipo profesional:

a) Canon F1 con medición semipuntual y objetivos Canon FD de enfoque manual y montura Breech Lock (de trinquete).

Esta sabia elección de equipo fotográfico por Rafael Onieva fue decisiva durante los capítulos de El Hombre y la Tierra filmados en Canadá (Parque Nacional Nahanny, Parque Nacional Kluane, etc, donde son frecuentes temperaturas muy bajas), ya que la Canon F1 es una cámara totalmente mecánica que no necesita pilas (únicamente para el fotómetro) y fue diseñada para poder funcionar perfectamente a temperaturas entre 60º C y -30º C, junto con niveles de humedad del 90%.

Por otra parte, la montura especial Breech Lock (de trinquete) de estos objetivos pre nFD era la mejor desde un punto de vista mecánico, ya que se asemejaba a una bayoneta y permitía mantener los objetivos completamente rígidos mientras se hallaban unidos a la cámara, sin que se produjera la más mínima holgura en ninguna parte.

b) Hasselblad EL/M de formato medio, motorizada, con ópticas Carl Zeiss CF de obturador central. Un auténtico lujo, que muestra muy a las claras el nivel del equipo de El Hombre y la Tierra. Rafael Onieva utilizó esta cámara en diferentes capítulos de El Hombre y la Tierra, tanto de la Serie Ibérica por ejemplo cerca de Pelegrina (Guadalajara) durante la crianza de lobos como de la serie Fauna Canadiense, como por ejemplo en el episodio titulado "Operación Rescate" (DVD 25 de la colección Divisa Ediciones) dedicado al salvamento de águilas calvas en el río Yukón, donde aparece usando esta cámara de formato 6 x 6 cm con empuñadura para optimizar el disparo a pulso y visor de prisma HC3-70 acoplado.

- Carlos de las Heras.- Ayudante de cámara, colaborador de Félix en muchos capítulos de El Hombre y la Tierra.

- Antonio Soubrier.- Ayudante de cámara, colaborador de Félix en muchos capítulos de El Hombre y la Tierra. Se encargaba también con frecuencia junto a Alberto Mariano Huéscar del cuidado y mantenimiento de las ópticas de las cámaras cinematográficas de 35 mm.

- Faustino Ocaña.- Ayudante de cámara, colaborador de Félix en muchos capítulos de El Hombre y la Tierra.

- Carlos Barrutia.- Naturalista que fue uno de los estudiantes de Ciencias Biológicas que formó parte del equipo de El Hombre y la Tierra durante la crianza de varios lobeznos en Pelegrina (Guadalajara), haciendo además fotografías de los mismos en diferentes fases de su evolución con cámara Praktica Super TTL y objetivo Carl Zeiss Jena Pancolar 50 mm f/2.
- Pedro Sevilla.- Montador de El Hombre y la Tierra.

- Miguel Caparrós.- Ayudante de montaje de El Hombre y la Tierra.

- Miguel Angel Pinto Cebrián y Suso Cubeiro.- Autores del libro Los Tres Cielos, Aventuras Infantiles de Félix Rodríguez de la Fuente.

- Javier Ceña.- Prestigioso naturalista que era estudiante de Ciencias Biológicas a mediados de los años setenta, cuando conoció a Félix Rodríguez de la Fuente y se convirtió en uno de sus colaboradores durante la cría de varios lobeznos en Pelegrina (Guadalajara), donde también alimentó autillos.

Posteriormente se consolidó en la faceta de experto entrenador de águilas.

- Herminio Verdú.- Realizador durante siete años ininterrumpidos, entre 1973 y 1980, de los legendarios programas radiofónicos La Aventura de la Vida, transmitidos los Jueves de cada semana y en los que El Maestro obtuvo niveles de audiencia y expectación desconocidos hasta ese momento en España, llegando a todos los confines de la Península Ibérica, gracias a la portabilidad de los transistores, lo cual hizo que fuera seguido por millones de oyentes tanto en las grandes ciudades, pueblos e incluso en el campo por agricultores, ganaderos y pastores.

Fue una de las personas más profundamente afectadas por la muerte de Félix y recuerda perfectamente las increíbles alocuciones radiofónicas hechas en directo por el gran naturalista y conservacionista español, sin ningún tipo de guión, improvisando todo con inefables niveles de precisión en sus palabras, haciendo un derroche de conocimientos y pasión y llegando al tuétano de todos los oyentes, programa tras programa, algo sin precedentes hasta entonces y que muy probablemente nadie podrá emular en el futuro.

- Luis Mariano Barrientos.- Uno de los más importantes naturalistas en la preservación del lobo ibérico, especialmente en la Comunidad de Castilla y León, habiendo conseguido en gran medida su estabilidad en la zona norte de la provincia de Palencia, desde Carrión de los Condes hasta Saldaña.

Profundo estudioso de la especie Canis Lupus Signatus, con la que lleva 30 años en contacto, siendo además un importante abanderado en la lucha contra el furtivismo.

- José Laiz Blanco.-Naturalista y colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente.

- Fernando L. Rodríguez.- Naturalista y colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente.

- Luis Serrano.- Naturalista y colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente.

- José Luis Nava.- Naturalista que ha tenido un destacado papel tras la muerte de Félix en el desarrollo y promoción del Refugio Las Hoces del Riaza, uno de los más importantes enclaves de la geografía española desde el punto de vista Ornitológico, incluyendo gran cantidad de rapaces y otras especies de aves.

Gran luchador por la salvación del buitre leonado y el buitre negro en la Península Ibérica.

- Carlos Llandres.- Prestigioso naturalista, colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente en diferentes capítulos de El Hombre y la Tierra y de la serie canadiense La Aventura de la Vida, dirigida por Félix.

Experto anillador de la Sociedad Española de Ornitología.
Colaborador de las revistas Periplo y Aire Libre.

Director de los Cursos de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha.

Profesor de Ornitología en los cursos del Medio Natural de la Comunidad de Madrid.

Director de Guías de Doñana, S.A.

Fundador y Director de Proyectos de Madre-Tierra Productora S.L.

Director, guionista, productor y realizador de abundantes series televisivas sobre fauna ibérica y africana para TVE, Canal Sur TV, etc.

Autor de los libros sobre naturaleza y fauna Las Rapaces (1980, WWF), La Perdiz Roja (1985, Fundación J.M.Blanc), Check List of the Birds of Doñana National Park and Border Areas of Cádiz, Huelva and Sevilla (1988, Guías de Doañana), Las Aves de Doñana (1990, Lynx Editions), Sevilla y sus Aves (1996, Zigzag Producciones S.L), etc.

- Javier Castroviejo.- Presidente del Comité Español de El Hombre y la Biosfera. Fue uno de los colaboradores de Félix Rodríguez de la Fuente a finales de los sesenta y comienzos de los setenta como integrante del legendario equipo de biólogos, naturalistas, fotógrafos y dibujantes que al mando de Félix hicieron la histórica Enciclopedia Salvat de la Fauna, comprada por millones de personas durante muchos años a través de fascículos semanales que eran posteriormente encuadernados.

- Fidel José Fernández.- Amigo personal de Félix Rodríguez de la Fuente, con el que mantuvo frecuente contacto directo entre 1972 y 1980.

Presidente del Fondo para el Refugio de las Hoces del Riaza.

Promotor del Refugio de Montejo.

Gran experto en la elaboración de censos de aves rapaces, cigüeñas, garzas, etc, especialmente en las provincias de Segovia, Burgos y Soria, labor a la que ha dedicado 35 años de su vida.

Tras la muerte de Félix Rodríguez de la Fuente en 1980, Fidel José Fernández ha sido una figura importantísima en la supervivencia de buitre leonado, buitre negro y diferentes aves de presa en España, supervisando personalmente la evolución poblacional de las mismas año tras año y estando en contacto permanente con míticos guardas de WWF España como Jesús Hernando Iglesias, alma máter del Refugio de Montejo.

- Pedro Retamar.- Autor y biógrafo. Periodista, fotógrafo y viajero especializado en naturaleza y ecoturismo. Frecuente colaborador de los suplementos El Viajero y Tierra de el periódico El País y cronista del blog "botasvagabundas".

Es igualmente autor de los libros ilustrados: Naturaleza Monumental de España, Villas Medievales, Los Rostros del Paisaje Español y Senderos Perdidos (que incluyen algunos de sus más destacados reportajes publicados en El País).

Ha realizado gran cantidad de fotografías y reportajes en las rutas utilizadas por el Dr Félix Rodríguez de la Fuente para hacer sus series cinematográficas documentales sobre fauna y naturaleza, especialmente la Sierra de Cazorla en Jaén, donde Félix filmó inolvidables secuencias de la serie El Hombre y la Tierra, sobre la berrea del venado en las orillas del embalse de El Tranco, el celo de la cabra montesa en las sierras de El Pozo y La Cabrilla, y la caza de recentales de cabra montesa por águila real, que constituyen una parte indeleble de la memoria de muchos amantes de la Naturaleza.

- El Blog de Forestman.- Excelente blog dedicado a la difusión y divulgación de la naturaleza, con multitud de artículos muy interesantes sobre temas medioambientales, el entorno natural, el paisaje, etc, sabiamente complementados por audiciones y videos relacionados con la naturaleza, el mundo forestal, la fauna y flora, los espacios naturales, las energías renovables, etc.

Hay diferentes y soberbios artículos sobre Félix Rodríguez de la Fuente: "Treinta Años sin Félix Rodríguez de la Fuente", "Félix Rodríguez de la Fuente: La Aventura de la Vida", "Félix Rodríguez de la Fuente a los ojos de Benigno Varillas", "29 Años sin Nuestro Amigo Félix", "Félix Rodríguez de la Fuente, Crónica de Viajes de la Aventura de la Vida", etc.

Blog de muy alto nivel, en mi opinión hoy por hoy uno de los referentes internacionales a nivel mundial entre los sites dedicados a Naturaleza, Biodiversidad, Fauna y Medio Ambiente, con gran riqueza de contenidos, y que que posee además una pléyade de enlaces de calidad sobre blogs y temas relacionados con la Naturaleza.

- Juan Luis Arsuaga.- Hoy por hoy uno de los más importantes paleontólogos del mundo. Codirector de las Excavaciones de Atapuerca donde desde mediados de los años noventa se han descubierto restos fósiles de 33 Homo Heidelbergensis en la "Sima de los Huesos" con una antigüedad de entre 250.000 y 300.000 años que confirman los primeros ritos funerarios de la historia, así como de una especie diferente que existió previamente: el Homo Antecessor, de aproximadamente 800.000 años de antigüedad, el homínido europeo más antiguo conocido hasta la fecha, del cual se hallaron restos fósiles de seis individuos que fueron acechados, cazados en emboscada y canibalizados en el nivel TD6 de la "Gran Dolina".

Asimismo, sus profundas investigaciones científicas han demostrado que los últimos neandertales coexistieron con la especie Homo Sapiens y se extinguieron hace aproximadamente 26.000 años, una fecha mucho más reciente de lo que se pensaba.
Protagonista de uno de los capítulos de la serie de RTVE La Huella de Félix emitida en 2010 como homenaje a Félix Rodríguez de la Fuente en el 30º Aniversario de su muerte.

Juan Luis Arsuaga explica la enorme importancia y acierto del título El Hombre y la Tierra, que demuestra muy a las claras cuales eran los dos entes que más fascinaban al mítico naturalista español, además de sus muy queridos animales, aclarando además el erróneo concepto "moderno" del hombre salvaje como "inculto" e "ignorante", ya que "no sabe", mientras que el "civilizado" es el que "sabe", puesto que un porcentaje muy elevado de "salvajes" poseen más sensibilidad y respeto por la naturaleza y son por tanto más cultos que muchos habitantes del "primer mundo", pensamiento plenamente compartido por Félix, que mostró siempre una gran admiración y respeto por las tribus más primitivas del planeta (pigmeos, indios waikas, etc), pueblos que transmiten sensación de libertad y paz, separados de la lejana "civilización", la polución, del stress, de la lucha del hombre que se llama a sí mismo "civilizado".

El campesino en España era conceptuado en la época de Félix poco menos que como ignorante y burdo, y ello ha hecho que se haya despreciado todo lo que el campo tiene de cultura y todo lo que la naturaleza tiene de biodiversidad, y así nos encontramos con la situación actual en la que exceptuando algunos enclaves concretos de Naturaleza, el resto ni se valora ni se conserva.

Félix fue también muy importante para devolver la dignidad, el prestigio y la admiración que merece la gente del campo, en unos momentos en los que en España se valora sobre todo la vida en la ciudad.

Arsuaga incide también en la importancia histórica de Alas y Garras, ciertamente genial y una de las primeras películas de Félix Rodríguez de la Fuente, en la que muestra lances de cetrería y a la vez informa sobre los campos de Castilla, con unos paisajes llenos de luz y de vida. Lo que Félix denominaba Estepa Cerealista y que es un paisaje cultural.

Félix tenía muy claro la importancia que tiene la cultura y el medio rural en la conservación de la Naturaleza.

- Andreu Buenafuente.- Popular presentador televisivo, humorista y productor, con 28 años de experiencia en radio y televisión, que inició su andadura profesional en 1982, con 17 años de edad, en la sección deportiva de Radio Popular de Reus y en 1989 fundó El Terrat, una empresa dedicada a la producción televisiva, radiofónica, publicitaria y cibernáutica.

En 2002 presentó el programa radiofónico La Isla de los Mosquitos, que combinaba frases ocurrentes con música.

Ha sido presentador de abundantes programas en diferentes canales televisivos desde 1992 hasta la actualidad, con unos índices de audiencia muy elevados.

Premio Ondas 1997 al mejor programa de radio local por El Terrat.
Premio Ondas 2000 al programa más innovador por La Cosa Nostra.
Premio Ondas 2006 al Mejor Programa de Entretenimiento por Buenafuente.
Premio de la Academia de Televisión 2003 al Mejor Programa Autonómico de Entretenimiento por Una altra cosa.
Premio de la Academia de Televisión 2004 como Mejor Comunicador.
Premio TP de Oro 2005 y 2006 al Mejor Programa de Entretenimiento por Buenafuente.
Premio Especial 2007 de la Academia de Televisión al Comunicador 10 de Programas.
Premio de la Academia de Televisón 2007 al Mejor Presentador de Programas de Entretenimiento por Buenafuente.

Ha dirigido además varias obras de teatro como Ustedes se preguntarán cómo he llegado hasta aquí, 20 Anys i Una Nit y Sotinho, habiendo en 2007 con El Tricicle en Garrik realizado además durante 2008 una gira de ocho meses por toda España con su espectáculo Terrat pack con sus amigos Corbacho, Berto y El Follonero, y creando junto a Berto en 2009 el espectáculo Verás que todo es mentira.

Ha colaborado en los periódicos Diari de Tarragona, Sport, El País, Nou Diari y La Vanguardia, habiendo escrito además artículos en El País Semanal, Dominical B y N y publicado viñetas en el New York Times.
Protagonista de uno de los capítulos de la serie de RTVE La Huella de Félix emitida en 2010 como homenaje a Félix Rodríguez de la Fuente en el 30º Aniversario de su muerte, donde recuerda el célebre episodio de El Hombre y la Tierra en el que Félix demuestra científicamente que la ruptura de huevos mediante piedras lanzadas con el pico por los alimoches no es algo aprendido sino que se trata de un componente genético.

Andreu Buenafuente expresa la enorme importancia del tratamiento cinematográfico de la filmación del mítico alimoche Gaspar. Toda España estuvo pegada al televisor pendiente de aquello y animando al alimoche a que rompiera el huevo de avestruz.

Estos fabulosos niveles de calidad, de emoción y expectación con una cámara plantada los minutos que hiciera falta y que confería todavía mayor dramatismo a las cosas, es algo muy difícil de repetir hoy en día, porque actualmente hay unos códigos audiovisuales mucho más frenéticos y rápidos y todo tiene que ir montado rápidamente.

"Para mí Félix es genialidad, precursor y emoción, muchísima emoción".

" Con Félix sabías que algo único estaba pasando en aquel reportaje que veías ".

" Félix conseguía ponerle una intensidad a la narración que prácticamente parecía en directo, como si estuviera a tu lado en el sofá de casa ".

" Félix dignifica en gran manera el medio televisivo. Le da mucha emoción pero también gran divulgación, prácticamente fílmico, con gran técnica cinematográfica y todo ello confiere a sus documentales universalidad y los convierte en clásicos".

" Ahora hay muchos avances técnicos, digitales. Hemos visto y veremos cosas alucinantes, pero no tienen la emoción de la voz de Félix. Por tanto, ante la pregunta: Cómo serían hoy en día los documenatles hechos por Félix Rodríguez de la Fuente?, sólo cabe una respuesta: Algo verdaderamente estratosférico".

" Félix tenía genialidad, y la genialidad traspasa y cala muy hondo".

" Félix era muy auténtico, frecuentemente contracorriente, genuino, y su mensaje calaba profundamente".

"Félix convirtió en único a Gaspar, como si fuera lo más importante del mundo en ese momento, y cuando toda mi familia y yo vimos en el salón de casa al ave lanzando con el pico la piedra contra el huevo del avestruz y rompiéndolo, nos hizo una impresión brutal".

En otro orden de cosas, Andreu Buenafuente invitó a su programa televisivo a Odile Rodríguez de la Fuente, hija de Félix Rodríguez de la Fuente, a quien hizo una muy interesante entrevista en la que se desveló como primicia el estreno en 2012 de la película Cuento de Lobos, una maravillosa historia con la voz de Félix Rodríguez de la Fuente y tecnología 3D, que será probablemente el acontecimiento cinematográfico del año.

- Lucía Etxebarría.- Escritora de amplia trayectoria, ganadora del Premio Nadal 1998 por su libro Beatriz y los Cuerpos Celestes.

Doctora Honoris Causa en Letras por la Universidad de Aberdeen.

Ganadora del 53º Premio Planeta en 2004 con su obra Un Milagro en Equilibrio.

Sus libros han sido traducidos a diferentes idiomas como alemán, francés, italiano, portugués y noruego.
Protagonista de uno de los capítulos de la serie La Huella de Félix, emitida por RTVE en 2010 como Homenaje a Félix Rodríguez de la Fuente en el 30º Aniversario de su muerte.

Expresa su convencimiento de que en España se han hecho cosas irreversibles en cuanto a deterioro urbanístico, sobre todo la catástrofe urbanística que se ha llevado a cabo en el litoral español producto de intereses económicos particulares y de la especulación inmobiliaria, y que ha sido muy nociva sobre todo para el Mar Mediterráneo.

Rememora además como siendo niña veía siempre en televisión la serie El Hombre y la Tierra junto a su madre y que a ambas les fascinaba, siendo la famosa escena del águila real que captura al recental de cabra montesa el momento que más la impresionó, y comenta que este tipo de documental de altísima calidad ya no se puede hacer, porque ninguna televisión tendría el valor de emitir secuencias sin música y porque los documentales modernos de naturaleza y fauna suelen ser muy sensacionalistas.

"Mi generación es la primera que ha dejado de vivir en pueblos. Somos los primeros que no hemos crecido con caballos, perros, gatos, huevos y gallinas. Desde luego, la sociedad occidental en general no tiene ningún contacto con la naturaleza. Hemos perdido olfato, agudeza visual, oído, etc, ya que vivimos en un contexto con exceso de estímulos, de contaminación lumínica, de ruido, etc. Los jóvenes no se dan cuenta de que el consumo va irreversiblemente unido al deterioro ecológico y de diferentes recursos naturales, y con frecuencia no tiene la suficiente información. Mucha gente cree que el hombre está en lo alto y los animales por debajo, sin darse cuenta de que el ser humano al igual que los demás animales, está integrado en un ecosistema. No puede ir por libre, porque si sigue por ese camino, no sólo desaparecerán los animales, sino él también".

- María Escario.- Popular presentadora de televisión, Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.
Inició su andadura profesional en 1985, presentando diferentes ediciones del Telediario, el programa 48 Horas y el informativo Buenos Días.

Desde mediados de los años ochenta se especializó como presentadora de espacios deportivos como Estudio Estadio, Estadio 2.

Es asimismo presentadora de la información deportiva del Telediario desde hace varios años, junto con María Casado y Marcos López.


Fue nominada a los premios ATV 2002 como Mejor Comunicadora de Programas Informativos por su labor al frente de Telediario.

Gran profesional, fue una de las pioneras en el acceso de la mujer al entorno mediático deportivo, formando parte además de una nueva generación de presentadoras de informativos en la que destacan Julia Otero, Concha García Campoy, Angeles Caso, Elena Sánchez, etc.

Ha sido enviada especial de RTVE nada menos que en cinco olimpiadas: Seúl 1988, Barcelona 1992, Atlanta 1996, Sidney 2000, Atenas 2004 y Beijing 2008, además de haber presentado en directo gran cantidad de eventos deportivos de todo tipo.

Desde el año 2000 es miembro del Jurado Príncipe de Asturias de los Deportes así como de los Premios Laureus considerados los Premios Nobel del Deporte a nivel mundial.
Protagonista de uno de los capítulos de la serie La Huella de Félix, emitida por RTVE en 2010 como Homenaje a Félix Rodríguez de la Fuente en el 30º Aniversario de su muerte.

"Félix era honestidad, pasión y entusiasmo puro".

"Entre Félix y los niños había algo muy importante: había entusiasmo".

"Probablemente, durante los programas de Félix Rodríguez de la Fuente en televisión, era el único momento en que toda la familia estaba unida".

"Era un gran narrador de historias, un gran seductor que te hipnotizaba y te metía en la cabeza una serie de conceptos que no habías oído nunca, que no habías oído nunca. Era un hombre que te aproximaba a la Naturaleza, un cuaderno de campo en sí mismo".

María Escario comenta además que debido a la enorme influencia que Félix tuvo en su vida, estuvo a punto de estudiar la carrera de Biología.

"Es una huella eterna que le agradeceré siempre a Félix".

"Félix entró en mi vida como El Maestro, el Maestro de la Naturaleza".

"Félix creó una conciencia social hacia la protección de ciertas muy importantes. A Félix le debemos mucho y el tiempo pone a cada uno en su sitio. Y aunque parezca increíble, 30 años después de su muerte, su mensaje es más fuerte ahora que entonces, porque su huella es ahora cuando la estamos viendo".

- José Antonio Labordeta.- Famoso cantautor, escritor y político aragonés, Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo, Doctor Honoris Causa por la Universidad de Zaragoza, Gran Cruz de la Orden de Alfonso X El Sabio y Medalla de Aragón.

Hombre recio, genuino, auténtico e histórico personaje muy entrañable, con muy profunda formación cultural y humanística. Su padre fue Catedrático de Latín entusiasta de la poesía clásica antigua.

Recibió además el influjo de su hermano Miguel Labordeta, uno de los mejores poetas españoles de la posguerra.

Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Zaragoza.

Profesor de Geografía, Historia y Arte en el Instituto de Bachillerato Ibáñez Martín de Teruel y en el Colegio Menor San Pablo hasta 1970.

Profesor de Historia y Director en los Institutos Buen Pastor Pignatelli y Alto de Carabinas entre 1970 y 1976, año a partir del cual se dedica más plenamente a su labor como cantautor, que había iniciado dos años antes con el álbum Andros II, al que seguirían Tiempo de Espera (1975), Cantes de la Tierra Adentro (1976), Que no Amanece por Nada (1978), Cantata para un país (1979), Las Cuatro Estaciones (1981), Qué queda de tí, qué queda de mí (1984), Aguantando el Temporal (1985), Qué Vamos a Hacer (1987), Trilce (1989), Tú, yo y los demás (1991), Canciones de Amor (1993), Recuento (1995), Paisajes (1997), Labordeta nueva visión (1999) y Con la Voz a Cuestas (2001).

Cantautor y poeta de la tierra, creador de temas impregnados de melancolía y apego a las raíces, algunos de los cuales fueron destacados éxitos de ventas como Canto a la Libertad, Aragón, Somos o Banderas Rotas, habiéndose revelado además como un buen escritor tanto con Diario de un Náufrago (1988), quizá su cimera obra poética como con otras antologías poéticas como Sucede el pensamiento (1959), Cantar y Callar (1971), o el poemario aragonesista Monegros (1994), sin olvidar una extensa obra poética en la que destacan obras como Cada cual que aprenda su juego (1974), Mitologías de Mamá (1992), Cuentos de San Cayetano (2004), etc, así como obras ensayísticas de impresindible lectura como Aragón en la Mochila (1983), Un País en la Mochila (1995, obra muy valiosa porque incluye ampliados los guiones del legendario programa televisivo) y Con la mochila a cuestas (2001).

Creador, guionista y presentador del programa de Televisión Española Un País en la Mochila, serie de 24 capítulos emitidos entre 1995-2000 que cosechó grandes índices de audiencia y se convirtió en un clásico, con su mochila a la espalda, recorriendo la España interior y mostrando aspectos desconocidos del país y las gentes que en él viven.
José Antonio Labordeta fue un gran admirador del campo y sus gentes, así como de la diversidad orográfica, poblacional, gastronómica, etc, de España.

José Antonio Labordeta, gran admirador de Félix Rodríguez de la Fuente, murió el 19 de Septiembre de 2010, muy poco tiempo después de haber protagonizado uno de los capítulos de la serie televisiva La Huella de Félix, emitida por RTVE durante 2010 como homenaje a Félix Rodríguez de la Fuente en el 30º Aniversario de su muerte, donde con su proverbial sabiduría explica que Félix fue un hombre con un amor propio tremendo y muy impetuoso en la lucha contra toda la incomprensión de los aspectos ecologistas, conservacionistas y de protección del medio ambiente y la Naturaleza.

Denomina además telúrico al aullido del lobo que tanto fascinaba a Félix e incide en su importancia histórica dignificando el mundo animal y el mundo rural, con un respeto absoluto hacia las diferentes especies, los árboles, los ríos, conceptos que antes de él prácticamente no existían, ya que los árboles se conceptuaban como algo que servía para cortar la madera, los animales para comer y los ríos para bañarse.

Pero Félix comienza a descubrir para sus masivas audiencias que todo ello forma un mundo vivo y con personalidad propia.

Labordeta rememora con emoción las estremecedoras imágenes de uno de los capítulos de El Hombre y la Tierra dedicados a los lobos, en el que una loba, acosada por el hombre que la busca para matarla, se ve obligada a transportar a sus lobeznos y cambiarles de sitio varias veces, lo cual provoca la muerte de uno de ellos - al que su madre no ha tenido tiempo de trasladar desde la guarida original- por inanición y frío, y la enorme ternura que mostraba la loba en todo momento.

"Félix tenía un atractivo tremendo como persona y una gran fuerza con su expresión".

"Félix aportaba emoción con sus palabras, con sus gestos, y te enganchaba. Le veíamos toda la familia. Era un rito. Te estremecías programa tras programa".

Un grande del siglo XX cuyo legado sigue plenamente vigente.
FÉLIX NO HA MUERTO.

Copyright Text and Indicated Photos by José Manuel Serrano Esparza. LHSA